POR ALTAGRACIA ORTIZ G.
Un resucitador cardíaco le fue colocado esta semana a un hombre de 45 años que padecía de una cardiomiopatía dilatada el cual prácticamente murió por la dolencia que le producía la enfermedad del corazón. Un dispositivo cardíaco colocado justo en el momento de la paralización, le devolvió la vida.

La intervención fue practicada por el cardiólogo hemodinamista Pedro Ureña, quien colocó el desfibrilador (resucitador) que devolvió la energía al corazón de Bienvenido Johnny López, oriundo de un campo de Constanza. El procedimiento se realizó en el Centro de Diagnóstico, Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat).

El caso fue conocido a través de los medios de comunicación. En ese momento el paciente pedía la donación del desfibrilador.

El dispositivo cardíaco tiene un costo superior a los US$27,000 y se estima que es muy alta la cifra de dominicanos que muere en espera de poder colocarse un dispositivo de ese tipo.

El doctor Pedro Ureña habló del síndrome de cardiopatía dilatada, una enfermedad que hace que el corazón se canse y la persona no puede desarrollar sus actividades con normalidad.

“El paciente hizo varias arritmias y en esa condición por lo general el paciente muere, pero afortunadamente él estaba listo para la colocación del desfibrilador”, explicó.

El desfibrilador es un aparato que tiene como función monitorear el corazón y darle un choque eléctrico si fuera necesario, explicó Ureña.

“El dispositivo es muy costoso, pero gracias a la colaboración de Medtronic, Cedimat y Heart Care, pudimos resolver la situación”, expresó el especialista, satisfecho. El paciente ahora tendrá que llevar un tratamiento y sus médicos esperan que en lo adelante mejore en forma significativa su calidad de vida.