Experiencia. Tiene la experiencia 20 años en béisbol invernal dominicano y 15 en las Grandes Ligas con los Bravos de Milwaukee, Bravos de Atlanta, Los Cachorros, Oakland, Cleveland y Texas

San Pedro de Macorís.-Los multimillonarios contratos de Grandes Ligas o registrar actuaciones destacadas no deberían ser excusas para que el pelotero latino participe en el béisbol de invierto de su país.

“Siempre he defendido, y en mi época de pelotero lo hice, que el hecho de que un jugador se destaque en las Grandes Ligas, no debería ser un obstáculo para que participe en la liga de su país”, expone Rico Carty, de 66 años.

Lo que sí el ex toletero de la Gran Carpa recomienda a los peloteros de hoy es no entrar al terreno de juego si no se encuentra en por lo menos un 90 por ciento de condiciones.

“En este caso, no solo se estarían exponiendo innecesariamente a una lesión, sino también que brindarían un feo espectáculo al fanático”, añade.

Para apoyar su planteamiento de la necesidad de que el pelotero que brille en en las mayores también juegue en su país, Carty puso de ejemplo lo que ocurrió el año pasado con la incorporación de Robinson Canó a las Estrellas Orientales.

“Eso sirvió de inspiración, no solo a los demás jugadores , sino también al fanático, que acudió en masa al estadio para dar apoyo al equipo”, expone.

Resalta el daño que se le hace el béisbol de invierno cuando los estelares no participan con sus respectivos equipos.

“Baja la calidad y el fanático se aleja”, sostiene.

Reconoce que la situación de hoy es distinta a la de su época y que la diferencia la establecen los contratos mutimillonarios.

“Pero ningún equipo le prohibe a sus peloteros que jueguen en sus países, esa son decisiones de los mismos jugadores”, sostiene.

Entiende que en todo esto han contribuido los buscatalentos, quienes recomiendan a los peloteros que no jueguen en sus ligas.

En su caso particular, recuerda que siempre participó en la pelota de invierno.
“Incluso, el año en que gané el título de bateo de la Liga Nacional (1970) juegué en mi país, me lesioné y perdí la temporada siguiente de Grandes Ligas” , recuerda.
Nada de eso, sin embargo, impidió que siguiera jugadando en el torneo de béisbol dominicano.