A l nuevo presidente del Licey, Ricardo Ravelo, no le gustan mucho las cámaras y prefiere siempre hablar con los hechos.
Sin embargo, admite que con el alto cargo que ostenta estará obligado a conversar con frecuencia.
Ravelo es parte de una familia muy vinculada al Licey y ahora quiere aportar desde la presidencia.
Aunque siempre ha sido “Un Tigre de verdad”, de manera formal comienza en el club en el 2005 como asesor legal.
En el 2013 asciende a vicepresidente y en total ha tenido cinco puestos importantes diferentes.
Forma parte de un equipo que tendrá presidente, gerente y mánager nuevo y los fanáticos esperan que ganen el campeonato.
Durante una entrevista para Impacto Deportivo, que se verá el sábado por CDN Deportes, Ravelo afirmó que le gusta el trabajo en equipo para lograr mejores resultados.
Es por ello que cada tarde se pone en contacto con las diversas comisiones para estar al tanto de que se ejecute cada tarea.
No le gusta que le digan “presidente”. Prefiere que le digan Ricardo.
Uno de sus momentos más emocionantes fue cuando se produjo el “Franciscazo” y el otro cuando en el 2017 el Licey le ganó a las Aguilas en Santiago.
Ravelo quiere retomar el estilo de confraternidad del Licey con los jugadores que se remonta a los tiempos de Tom Lasorda. Cree que es necesario que la directiva viaje a Estados Unidos y esté constantemente dando calor a los jugadores del Licey. Hablará personalmente con cada uno de los jugadores nativos del club.