SANTIAGO, (AFP) – La secretaria de Estado estadounidense Condoleezza Rice y el presidente haitiano René Preval se reunieron el sábado en Santiago al margen de la investidura de Michelle Bachelet, y hablaron de la situación económica y de seguridad en Haití, al que Estados Unidos promete ayudar, se informó oficialmente. “Le dije a la señora Rice que deseo ver máquinas de trabajo público remplazar a los tanques de la Minustah (la Misión de Estabilización de ONU en Haití) en las tareas de saneamiento, infraestructura y salud”, declaró Preval.

El presidente electo de Haití dijo que también le presentó su proyecto para un pacto de gobernabilidad a largo plazo con los partidos políticos y la sociedad civil. El proyecto responde al deseo de la comunidad internacional de que el gobierno haitiano contemple a la oposición.

Rice aseguró a Preval que Estados Unidos será un buen colaborador de Haití, indicó el portavoz del departamento de Estado, Sean McCormack.

Rice prometió que Estados Unidos “buscará la forma de ayudar”, y subrayó “la importancia de trabajar con las organizaciones financieras internacionales”, dijo McCormack.

En la reunión, que duró poco más de media hora, ambos discutieron medidas socio económicas en Haití, en particular destinadas a bolsones de pobreza como Cité Soleil (300.000 habitantes), que está controlado por bandas armadas.

Durante su estancia en la capital chilena, Preval se reunió además con el presidente sudafricano Tabo Mbeki, que también llegó para la asunción de Bachelet.

Ninguna información se reunió sobre lo conversado en esta reunión, cuya importancia radica en que Jean Bertrand Aristide -presidente de Haití hasta su derrocamiento en febrero de 2004- está refugiado en Sudáfrica y ha dicho que desea volver a su país.

La Minustah se desplegó en 2004 para asegurar la transición tras la caída del presidente Jean-Bertrand Aristide en medio de una rebelión armada. Cuenta actualmente con unos 7.500 soldados y 2.000 policías internacionales.

Las tropas proceden en gran parte de países sudamericanos y están bajo el mando de un general brasileño.

El mandato de la Minustah se renueva cada seis meses, y el actual fue prolongado el mes pasado hasta agosto.