Ante la nueva tendencia de tirarse una cubeta de agua fría como parte de una campaña para recaudar fondos para los estudios de investigación acerca de la enfermedad Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), han sido muchas lasa personas que se han dejado empapar con agua helada. Pero, ¿Tiene alguna consecuencia tirarse ese cubetazo de agua helada?

Según el doctor del Instituto Biológico de la Salud de España, Domingo Pérez León,  la gente con problemas de tiroides pueden sentir algunos efectos adversos, ya que estas personas con hipertiroidismo suelen ser frioleras, por lo que una ducha con agua fría no sería lo más indicado».

«Otro tipo de personas que deberían adoptar algún tipo de precaución serían las que padecen algún problema cardíaco», dice según una publicación del portal ABC de España.

Explica que en general, las duchas de agua fría son estimulantes, mientras que las de agua caliente son relajantes, por lo que una buena elección sería la de ducharse con agua fría cuando queramos estar despiertos o iniciar algún tipo de actividad, y ducharse con agua caliente antes de acostarse o como método de relajación.

«Nos dice el doctor Pérez León que las duchas con agua caliente son, por ejemplo, muy beneficiosas en personas que tienen problemas para conciliar el sueño», agrega.