Hoy 
Por FIOR GIL
La embajada de México en el país y varias instituciones ofrecieron ayer un homenaje al benemérito de las Américas, Benito Juárez, al conmemorarse el bicentenario de su nacimiento.
En el acto celebrado en la plaza Benito Juárez, en la avenida México esquina doctor Delgado, fueron depositadas ofrendas florales en el monumento del patricio mexicano y el doctor Fernando Pérez Memén, pronunció una charla magistral como orador invitado. Previamente se realizó un minuto de silencio en homenaje a los trabajadores que murieron recientemente en una mina de carbón en México.
La embajadora Isabel Téllez de Ortega encabezó el acto y junto a otros funcionarios de esa legación diplomática depositó una ofrenda floral. En representación del gobierno dominicano estuvieron presentes los subsecretarios de Relaciones Exteriores Hugo Guiliani Cury y Sara Gueme y por del Congreso Nacional, el vicepresidente de la Cámara de Diputados Hugo Núñez y el senador Manuel Emilio Ramírez Pérez.
Entre las instituciones que depositaron ofrendas florales se encuentran la Cámara de Comercio Dominico-Mexicana, la Fábrica de Cementos Mexicano (CEMEX), Sigmas Alimentos. Asociación de ex alumnos del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, representado por Miguel Gil Mejía, quien la preside y Luis Altom Sosa, vicepresidente y el Restaurante Agave.
Estudiantes de la Escuela Básica Benito Juárez, presentaron un acróstico con las siglas del prócer mexicano.
El doctor Pérez Memén tras reseñar la biografía de Juárez dijo que este a sus 40 años de vida vivió un episodio doloroso de la historia de México, entre 1846 y 1848 época de la guerra contra Estados Unidos y la pérdida de Texas y de la Alta California. Además de las rebeliones indígenas a favor del autogobierno y de un comunismo agrario en varios pueblos de la Huasteca; y la guerra social Yucateca de carácter antifeudal, secularizante y a favor del igualitarismo. Tuvo que haber sufrido, asimismo, por la venta de 98 indios mayas de Yucatán a los esclavistas de Cuba desde 1848 hasta el 1861.
Dijo que por su admirable vida y por la trascendencia de su obra, la figura de Juárez tiene una admirable proyección y un justo y merecido reconocimiento como prócer no sólo mexicano, sino también latinoamericano, como héroe y redentor de la soberanía de América Latina. Así el Congreso de Colombia el primer día de mayo de 1867 declaró que el presidente Juárez ha merecido bien de América, por la abnegación y la perseverancia desplegada en la defensa de la independencia y la libertad de su patria.
El historiador citó que Juárez completó y afianzó las instituciones que no lograron establecerse en la Ley Fundamental de 1857 y se erigió en el campeón de la Reforma. Así emprendió la trascendental obra de secularización y desacralización de la sociedad y el Estado, que fue, en rigor de, la de situar a México en la Era Moderna.
Pérez Memén citó que al producirse la guerra de los tres años, los liberales dieron apertura a una nueva etapa de transformación en México, siendo entonces cuando con palabras de Juárez ante el Congreso, el 9 de mayo de 1961, el pueblo sintió la necesidad de no limitarse a defender sus legítimas instituciones, sino de conquistar nuevos principios, para que cuando venciera a sus enemigos, no volviese al punto de partida, sino que hubiese avanzado la reforma y afianzado las instituciones.
