SANTIAGO. Por segunda vez en menos de dos meses la Casa de Emaús, donde se celebran los oficios religiosos de la catedral Santiago Apóstol en esta ciudad, fue víctima de los ladrones, quienes la noche de este domingo cargaron consigo dinero y diferentes equipos.

En esta ocasión, desconocidos penetraron al centro apostólico y se llevaron la alcancía de las limosnas que dejan los feligreses frente a la imagen del Divino Niño.

La misa que tradicionalmente se oficia todos los lunes tuvo que ser suspendida por esta situación y por los próximos tres días no se oficiarán servicios relogiosos, según informó uno de los sacerdotes a la feligresía, quienes no confirmaron la cantidad de dinero que fue sustraído.

Temprano en la mañana de este lunes, técnico de la Policía Científica recolectaban evidencias del robo en la Casa de Emaús, ubicada al lado de la referida catedral.

En septiembre, el sacerdote Carlos Santana, canciller del arzobispado, había denunciado que un hombre tras recibir la absolución de sus pecados, lo despojó de un celular Blackberry y el dinero que tenía en los bolsillos.

 “Esta profanación de la Casa de Emaús, que sirve de templo por la reparación de la Catedral, ha llenado de tristeza a la comunidad parroquial. Durante tres días no habrá misa por este hecho vandálico.

Los fieles se congregarán para orar y hacer vigilia, como un acto de desagravio ante el hecho cometido”, informó el periódico semanal Camino, diario oficial de la catedral.

Las autoridades eclesiásticas, lamentaron el estado de inseguridad y descomposición social que sufre la sociedad dominicana, a la vez que invitaron a seguir orando para cambiar tantos signos de muerte que presenciamos a diario. La acción de los pillos fue duramente condenada por la feligresía que regularmente acude a escuchar las palabras de Dios.

Asimismo, reclamaron al Gobierno la erogación de los recursos prometidos para concluir la remodelación de La catedral Santiago Apóstol, debido a que en este lugar hay más seguridad. Pese al notorio patrullaje policial, los robos y acciones delincuenciales continúan registrándose en Santiago, lo que ha sido calificado como un desafío a las autoridades.

Cuando el sacerdote Santana fue víctima del asalto justo cuando hacia acto de confesión, indicó que “este es el indicativo del gran deterioro de la sociedad. Pero lo que me sucedió es poco.

¡Cuántas capillas han sido profanadas y el Santísimo Sacramento echado por el suelo porque lo creen de oro!”. En esta ciudad son frecuentes las denuncias de robos y asaltos en diferentes templos de oraciones. El semanario Camino informó que la Policía está investigando para determinar quiénes fueron los responsables del robo que se suma a otros en distintos templos del país.