Fueron muchas las parejas que se enamoraron en los años 60 con las canciones románticas de Roberto Yanés, un referente de la música en Argentina que se proyectó en toda Latinoamérica.
Boleros como “Escríbeme”, “Lágrimas del alma”, “Desesperadamente”, “Contigo en la distancia”, “Mi grito”, “Óyelo bien”, “Cariñosa”, “Enamorada”, “Pecado” y “Amor de temporada”, son solo algunos de los títulos que nos legó este gran artista fallecido el pasado jueves a los 87 años.
Músico, cantante, compositor y actor, Roberto César Iannacone nació en Córdova, Argentina, el 25 de abril de 1932, y flechado por la música, participó en programas de radio desde niño.
Yanés estudió en el Conservatorio Provincial de Música y durante el servicio militar obligatorio de su país, realizaba presentaciones en el casino para oficiales.
En 1956 se trasladó a la ciudad de Buenos Aires, donde trabajó como pianista y cantante de boleros, tango y jazz, hasta que en 1958 firmó como solista con la disquera CBS. Con este sello grabó “Dónde estará mi vida” y “El espejo”, temas que alcanzaron un relativo éxito.
A partir de entonces, el artista argentino fue un consagrado del bolero, a nivel de otros representantes australes del género, como Lucho Gatica y Leo Marini.
Según consta en su biografía, en 1963 grabó con Astor Piazzolla un LP con los temas “Cafetín de Buenos Aires”, “Margarita Gauthier”, “Fuimos” y “Griseta”.
Después de retirado -hace décadas- de las grabaciones y presentaciones, Yanés se dedicó a enseñar canto a los jóvenes. Falleció el pasado jueves 30 de mayo en su Argentina a los 87 años.
Reacción de Luis Medrano. El empresario artístico Luis Medrano, quien trajo a Roberto Yanés cuatro veces a la República Dominicana, dijo que es una pena la partida de este gran artista.
“A Roberto lo contratamos en cuatro ocasiones para los conciertos ‘Cien años del bolero’ y ‘Pasión por el bolero’. La última vez fue a un evento privado en 2003 donde compartió el escenario con Maridalia Hernández y estuvo acompañado al piano por el maestro Jorge Taveras”, indicó Medrano.
Añadió que Roberto era un hombre jovial, alegre, muy dinámico, cooperador y excelente compañero.
“Siempre tenía un chiste a flor de labios, vivía cantando, ejercitando sus cuerdas vocales en cualquier reunión. Recuerdo que en ‘Cien años del bolero’, cuando estaba Lucho Gatica en la cartelera, me decía que lo pusiera antes que este para que no le cantara el bolero ‘La novia’ primero.
Luis Medrano manifestó que en esos conciertos en los años 90 gozaron mucho con Yanés, a quien calificó como un gran artista, “en todo el sentido de la palabra”. Dijo que que no aceptaba la vejez, pues siempre se mantenía alegre y con un espíritu juvenil.
“Que en paz descanse y mis condolencias para toda su familia”, concluyó.