Tras 18 años de espera, parece que ya llegó el momento en que los Rockies de Colorado ganen su primer título de división, en el competitivo Oeste del viejo circuito.

La gerencia de Colorado estuvo moviendo fichas durante el receso de la temporada para destronar, de una vez por todas, a los Dodgers de Los Ángeles o a cualquier otro combinado que se les meta en su camino hacia el cetro. 

La tropa de Jim Tracy tiene una rotación muy bien definida sobre los hombros del dominicano Ubaldo Jiménez, Jeff Francis, Aaron Cook, Jorge de la Rosa y Jason Hammel. Los abridores tienen la capacidad y fortaleza para lanzar 200 entradas, pero luego de ellos no hay suficiente profundidad con experiencia para llevar al conjunto a la postemporada.

El dominicano Jiménez tiene que demostrar que es un as de rotación, lanzando mejor en la primera mitad de la campaña, donde el frío, asegura, le hace un daño tremendo.

Francis y Cook deben probar que están 100 por ciento de salud luego de un 2009 en el cual las lesiones no le permitieron lanzar la ruta completa mientras que De la Rosa y Hammel tienen que enseñar que no están en la rotación de manera de fortuita, sino por puro merito.

El cuerpo de relevista está bastante sólido, tanto en el relevo largo como corto, en los brazos del taponero Houston Street, el recién llegado Rafael Betancourt, que puede lanzar el octavo episodio; además de Franklin Morales y Taylor Buchholz, quien lanzaría en el medio del partido.

La gerencia de Colorado consiguió en la temporada muerta mucho relleno para la banca, situación que los puso a sufrir la pasada estación. Trajeron al conjunto a Melvin Mora, Miguel Olivo, Paul Lo Duca, Jay Payton y el lanzador Tim Redding.

Asimismo, se despojaron de Garrett Atkins, Jason Marquis, Matt Murton, Mike McCoy, José Contreras, Yorvit Torrealba, Joel Peralta, Ryan Speier, Matt Herges, Josh Fogg, Joe Beimel y Alam Embree.

Ofensiva.  La alineación de Colorado no mete miedo, pero sí tiene hombres que pueden producir en grande. El manager Tracy se apoya en el juego pequeño para desarticulizar la defensa del rival.

El orden al bate proyectado es Carlos González, Dexter Fowler, Todd Helton, Troy Tulowitzki, Brad Hawpe, Chris Iannetta, Ian Steward y Clint Barnes.

El veterano Helton, de 36 años, está llegando al final de su carrera, pero aún puede mantener su promedio de bateo sobre los .300, además de colocar la bola entre los canales para producir batazos de doble merito. La pasada campaña, promedió .325, con 15 jonrones y 86 remolcadas.

La responsabilidad mayor descansará sobre el torpedero Tulowitzki, quien tiene la capacidad para conectar más de 35 cuadrangulares y unas 120 empujadas, así competir para el premio de Jugador Más Valioso (MVP).

Tulowitzki se caracteriza por empezar muy lento y luego ir tomando el ritmo. Ahora tiene la obligación de comenzar como una tromba.

Otro que debe ayudar al club es el jardinero Brad Hawpe, que se puede desempeñar tanto en el jardín izquierdo como en el derecho.

Hawpe bateó .285, con 23 batazos de cuatro esquinas y 86 careras remolcadas.

Colorado tiene las herramientas para alcanzar el sueño anhelando, pero tendrán que jugar con un verdadero conjunto para aplastar a Dodgers, Arizona y San Francisco, que también tienen herramientas para conquistar el galardón. De todos modos, nos quedamos con los Rockies para ganar la división o el comodín.  

Las claves

1.  Problemas a la vista

El dirigente Jim Tracy tendrá que contar con la suerte para repetir su regreso a la postemporada. El conjunto tiene una buena rotación, pero carece de otros hombres que puedan realizar esa labor ante cualquier eventualidad.

2. Salón de la Fama

El veterano Todd Helton sigue acumulando números para llegar al Salón de la Fama. Helton promedia de bateo .328 de por vida, con 1,202  empujadas y 325 jonrones. Expertos lo minimizan por jugar en el estadio de Colorado.