SCOTTSDALE, Ariz.- Cuando no está lanzando, Félix Rodríguez es el “Conde de Montecristi”, poseyendo unos 1,000 acres de terrenos de arroz y plátanos en la República Dominicana.

Ese es su primer amor, donde nació, donde aprendió el valor de un arduo día de trabajo bajo el intenso sol de la isla.

El relevista de los Gigantes es un vaquero moderno, paseando por los campos en un pequeño tractor o levantando un poco de polvo en su caballo, mientras observa las vacas y a sus trabajadores.

Es confortante para Rodríguez saber que regresará allí un día, que sus hijos Félix, de 8, y Helen, de 6, conocerán el pasado de su familia.

Rodríguez es un hombre fuerte con piernas de pistones que parecen tan duras como las de aquellos caballos en casa.

“Las piernas”, explicó Rodríguez, “ahí es donde uno consigue su poder”.

Rodríguez llegó a los entrenamientos de primavera en plenitud de condiciones y la sirena ya ha sonado: Rodríguez planea alternar más sus lanzamientos, mezclando las bolas rompientes y los cambios.

El derecho siente que podría tener su mejor año de por vida, porque a los 31 años está totalmente sazonado y es mucho más inteligente en el montículo. Como preparador, a Rodríguez no le anotaron en 33 de sus últimas 38 salidas y registró efectividad de 1.78, algo casi intocable.

Y los cambios de velocidades y de lanzamientos serán la clave.

“Creo que ahora soy más fuerte que antes”, dijo Rodríguez, “y el rol no importa. Puedo ser preparador o cerrador. Lo único que quiero es ayudar a que mi equipo gane. Soy mejor ahora porque puedo usar mi slider y mi cambio con más frecuencia. Eso me ayudará”.

Ha sido difícil para Rodríguez el salirse del estilo de un lanzamiento, sin embargo. Es un gran lanzamiento, esa recta super sónica, que los bateadores han aprendido a esperar.

Rodríguez posee un buen sinker, aunque usualmente se queda en el medio.

Durante las prácticas de bateo el domingo, Félix rompió ocho bates con su sinker, mientras sus compañeros de equipo lo motivaron a quitarle algo al slider para ser más efectivo.

“Definitivamente ya no será un tipo de un lanzamiento”, dijo el dirigente Felipe Alou. “Su recta es tremenda, pero creo que lo que hará la diferencia será su tenedor. Su bola está rompiendo muy bien”.

Versión (Dionisio Soldevila Brea).