Nueva Hampshire, EE.UU.  AP.  Mitt Romney recibió ayer el respaldo de John McCain, quien ganó ya en dos ocasiones las primarias en Nueva Hampshire, y manifestó sus expectativas de que una victoria por menos de 10 votos en las asambleas de Iowa se convierta en una serie de triunfos más contundentes que le den la candidatura presidencial republicana.  

Sin dejarse impresionar, Newt Gingrich se burló del ex gobernador de Massachusetts, al tacharlo de liberal convertido en moderado y ahora disfrazado de conservador.  

El ex senador de Pensilvania, Rick Santorum, buscó reunir el apoyo de los conservadores, luego de quedarse muy cerca de la victoria en Iowa. “Espero sorprender a unas cuantas personas, como lo hicimos” en la primera contienda de la campaña, dijo.   “Esta competencia está todavía abierta para cualquiera”, dijo por su parte el ex gobernador de Utah, Jon Huntsman, quien no participó en las asambleas de Iowa con el objetivo de concentrarse en las primarias del próximo martes.   Romney es el favorito para imponerse en Nueva Hampshire y se desconoce cuánto dinero tienen disponible sus rivales para sus actos proselitistas en busca de lentificar o frenar al político de Massachusetts.

Asimismo, en un reflejo del apoyo que recibe de políticos muy conocidos, Romney anunció que realizará el jueves actos de campaña con la gobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, y habló acompañado por McCain en Nueva Hampshire.   “Ha llegado el momento de que los republicanos elijan a un candidato presidencial, un nuevo referente, que tenga la capacidad y la determinación de vencer al presidente (Barack) Obama”, dijo McCain, quien cayó ante el actual mandatario en los comicios del 2008 y quien atrae a los votantes independientes del estado.   Por lo pronto, el grupo de aspirantes republicanos comenzó a reducirse.