Rosa Esther Lamarche 
¡Desde los  territorios del sueño y la imaginación!  

<P> Rosa Esther Lamarche <BR>¡Desde los  territorios del sueño y la imaginación!  </P>

Tal como lo había prometido Aurora Díaz, quien desde hace más de dos años coordina con esmero, carisma y entusiasmo el programa de exposiciones del centro comercial Blue Mall, localizado en la avenida Winston Churchill esquina avenida Gustavo Mejía Ricart, después de un inicio del calendario de 2013 tan poderoso como el que ha significado la exhibición “Colores Maestros” con obras de los consagrados Antonio Guadalupe, Rosa Tavárez y José Perdomo, la nueva muestra que acoge el espacio expositivo auspiciado por  el Grupo Velutini presenta la obra de una nueva personalidad creadora en  el medio artístico dominicano.

En efecto, Rosa Esther Lamarche despunta de manera sorpresiva y sorprendente con una propuesta pictórica caracterizada por la informalidad, vitalidad, lirismo, frescura y polisemia de su repertorio sígnico y energética policromía.

La admirable síntesis formal y las sutiles transparencias de sus composiciones operan desde unas superficies que, en primera instancia, operan gracias a su vertiginosa capacidad imagética y a un imprevisto caudal simbólico impregnado de enigmas, sueños, ilusiones, alucinaciones: magia, ficción y poesía. Y esto es revelación cristalina en pinturas como “Catarsis”, “Rosa D/Lirio” “Derritiendo fantasías”, “Guardando sueños”, “Venus cubierta de caracolas” y “Alfonsina sólo tuyo es el secreto del mar”…

La riqueza plástica, estética y metafórica que soportan la simultaneidad de planos y juegos texturales; la intensificación del “viaje” introspectivo hacia lo metafísico y lo surreal, más la distintiva calidad de imaginación que Rosa Esther Lamarche logra materializar con gracia inevitable en el prometedor extracto expositivo de “Rosa D/Lirio”-primera muestra individual con la que emerge de manera impactante-, contribuyen a la sorprendente capacidad de resistencia crítica en obras como las tituladas “Apagué las estrellas para que brillara tu Luna”, “Polvo sideral”, “Peces y espuma”, “Madrugadas de llovizna”, “Sílabas del agua”, “Rostro tejido en su asombro”, “El paso de la luz”, “Este mar mío”, “Flor salvaje, rumor de soles” y “El hombre y los tiempos”.

En estas pinturas opera con efectividad una inesperada celebración del sentido de la tierra, el espacio sociocultural, la condición femenina, el hábitat y las “calidades” o transparencias de la naturaleza y “el aire de la isla”…

Para la reconocida escritora dominicana Martha Rivera-Garrido “La pintura de Rosa Esther Lamarche, muy rápidamente ha transitado de uno a otro estado de su propia alucinación.

El sujeto femenino en ese texto visual, en ese tránsito, ha dejado de parecerse a sí mismo para encontrarse multiplicado en otras identidades menos reconocibles, más complejas.

Y es en esa metamorfosis donde ha madurado. Si bien todo comenzó con un estallido de color en la piel de formas humanas y vegetales cada vez más replicantes, la artista se ha movido a un territorio donde nos propone con mucha libertad el universo que va creando de acuerdo a su propia y personal cosmogonía”.

Asimismo, sobre su obra titulada “Quiero” (2011), el filósofo y escritor dominicano Armando Almánzar Botello observa: “Sugerente espacio proteiforme que recuerda ciertos elementos de la paleta de Chagall. Imagen simultáneamente intracorporal, celular y cósmica.

Conjunción, por simetría inversa y en diagonal, de lo solar-uraniano-masculino con lo lunar-ctónico-femenino… La vida que prolifera se manifiesta en un rumor visual de enigmáticas presencias… Diálogo creativo de los cuerpos y los elementos… ¿Meditación plástica sobre el Anima Mundi?”…

El rigor de factura y la honestidad de oficio se aprecian en una práctica pictórica en proceso con la que Rosa Esther Lamarche  proclama su intensa conexión existencial con los elementos claves del hecho plástico y con el médium pictórico en particular.

El estudio profundo del ser humano ha ocupado y sigue ocupando buena parte de su tiempo. Sus ideas, motivos y pasiones más íntimas, constituyen su fuente principal de inspiración.

Figuras a veces de impresión, otras veces oníricas o figurativas, predominan en su obra pictórica. Obra en la que de inmediato se advierte su intensa preocupación por el sentido de la vida, lo existencial y la condición humana.

Zoom

Rosa Esther Lamarche. Rosa Esther Lamarche nace en Santo Domingo, República Dominicana. Desde los seis años se inicia en el descubrimiento del arte y la práctica del dibujo. Pasando las tardes en la soledad del patio de su abuela, Marina Delgado Troussex, en Ciudad Nueva, se divertía dibujando,  pintando e imaginando formas llenas de colores, sueños y fantasías.

Realizó estudios de dibujo y pintura en la escuela del maestro Cándido Bidó, donde entra en contacto con artistas consagrados, tales como Guillo Pérez, Martín Santos, Fabré Saillent, Miguel Gómez y Manuel Traboux. Rosa Esther Lamarche ha realizado estudios de Psicología Clínica en la Universidad Autónoma de Santo Domingo y de Maestría en Terapia Sexual y Marital en UNAPEC.

Actualmente es docente en la UASD, APEC, UTESA y directora académica del Instituto de Servicios Psicosociales y Educativos (ISPE). Rosa Esther Lamarche debuta en los espacios expositivos (5to.piso) del centro comercial Blue Mall. Su primera exposición individual titulada “Rosa D/Lirio”, se mantendrá abierta a todo el público hasta el  domingo 24 de marzo de 2013.

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