El presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Roberto Rosario, defendió ayer su derecho a no responder preguntas de los periodistas sobre el proceso electoral, afirmando que en ese organismo hay una política de comunicación fríamente calculada.
El ejercicio del derecho a la libertad de prensa no puede conllevar a obligar a un funcionario más allá de los que son sus deberes y derechos, dijo Rosario tras negarse a informar sobre la auditoría al padrón electoral y al centro de cómputos, y la convocatoria a los partidos para conocer de los nuevos técnicos a ser nombrados en ese departamento.
Fue enfático al afirmar a los periodistas que cubren la fuente de la JCE, que lo quiera saber el país sobre las elecciones, en su momento haremos encuentros y en esos encuentros se informarán. Rosario fue abordado por los periodistas en los pasillos de la JCE.