La politóloga Rosario Espinal consideró que con la celebración ayer de dos reuniones del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) convocadas por las dos facciones que se disputan el control del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) se agudizará aun más la crisis que afecta a esa organización política.

Indicó que luego de las reuniones se vislumbra más difícil una solución pactada dentro de la organización más antigua del país. Lamentó que ambos grupos no pudieran llegar a un  acuerdo para efectuar una convención consensuada, de donde ese partido hubiera salido con más fuerza para competir en  las próximas elecciones. Consultada al respecto, expresó que el presidente del PRD, Miguel Vargas, cuenta con la ventaja de que posee la franquicia, y que supone que quienes aspiren en la organización tendrán que montarse en su tren o quedarían fuera.

Sin embargo, advierte que ese tren de Vargas no garantiza que en las próximas elecciones el PRD vaya muy lejos. Estimó que  los discursos pronunciados durante la reunión del CEN de la facción que lidera Hipólito Mejía demuestran que no están claros en lo que quieren, en cuanto a a si se quedan en el PRD o si por el contrario forman tienda aparte. Estimó que los seguidores de Mejía deben definir su estrategia en torno a si compiten con Miguel dentro de la franquicia por los puestos de dirección y los cargos congresuales y municipales, o si por el contrario formarán una organización alternativa.