Mientras el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y la Fuerza del Pueblo (FP) permanezcan divididos, el oficialista Partido Revolucionario Moderno (PRM), gobernarán sin contratiempos, como quedó demostrado en las pasadas elecciones municipales del domingo, así lo entiende la politóloga Rosario Espinal.
Espinal cree que esta situación puede provocar un considerable número de abstención como el observado el 18 de febrero, ya que el electorado podría entender que todo está definido y no acudir a las urnas.
“Yo pienso que la oposición, el peledeísmo que está dividido en dos facciones y mientras el peledeísmo esté dividido en dos facciones es sirviéndole en bandeja de plata al PRM que siga en el poder, porque yo escucho que si cada partido, que si la Fuerza del Pueblo, que si el PLD va a salir por su cuenta a buscar sus votos y que la sumatoria va a ser la gran sumatoria, el electorado ve una franja política dividida y no mira en gran medida para allá, porque lo que ve es pleito, problemas entre ellos, entonces se convierte en un desmotivador”, aseguró Espinal
Al ser entrevista en el programa El Sol de los Sábados, Espinal entiende que ni siquiera los casos de corrupción que ha motivado la destitución de algunos funcionarios, afectará al partido de gobierno, al menos para mayo, aunque es probable que esto pase factura más adelante.
Asimismo, entiende que para los partidos opositores volver al poder, deberá ser sobre la base de la unidad y cuyos resultados no se verían en lo inmediato.
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“Mientras ellos (la oposición), no entiendan eso y piensen que su poder es tan grande que ellos van a echar una batalla entre ellos a ver quién se posiciona en segundo y que cuando alguien esté en segundo estará a las puerta de un triunfo, creo que son cálculos políticos riesgosos, que están haciendo, yo creo que las elecciones (municipales) le envían un mensaje muy claro al peledeísmo de que si no resuelven sus problemas corren muchos riesgos”, sentenció.
Sin embargo, entiende que el interés por la política no ha mermado como plantean algunos sectores, indicando que la República Dominicana es un país altamente politizado y eso no ha variado en los últimos tiempos.
En ese sentido, la politóloga entiende que de repetirse los resultados de febrero en mayo, el problema no sería la mayoría que tendría el PRM, sino el uso que le pueda dar al poder, ya que tendría todo a su favor para gobernar de manera tranquila, pero no tendría a nadie para culpar.