Apropiándose del título del famoso bolero Simplemente una ilusión, que inmortalizara el cantante puertorriqueño Gilberto Monroig, nos trae en esta muestra la pintora dominicana Rosario Rivera-Bond, mucho más que ilusiones
Nos referimos a su última exposición individual recientemente expuesta en el Museo de Arte Moderno de Santo Domingo, la que consta de 40 obras de arte, en las que la artista trabaja con objetos reciclados de uso femenino (cosméticos, perfumes, joyas, trajes, zapatos) combinándolos con medios mixtos y óleos, materiales con los que busca la artista emular el consumismo y la acumulación, como situaciones demandantes hacia la mujer contemporánea.
Además, la artista sugirió previamente a los invitados llevar a la exposición un objeto femenino no mayor de 30 centímetros, entre ellos, collares, anillos, maquillaje, etcétera, con el que realizó un performance de reciclaje durante el encuentro. Desde la noche de la apertura el pasado 9 de marzo, se pueden observar una cantidad de objetos donados y que en si se convierten en una de las instalaciones expuestas. Tal como lo sugirió Rosario Rivera, se pueden observar, collares, cadenas, llaveros, peinetas, y maquillaje en especial pintalabios y polvos compactos.
A Rosario Rivera-Bond la empecé a observar por su participación en la colectiva Away que se celebró en París del 8 al 22 de marzo de 2007, en las que fueron invitadas por la UNESCO, artistas de la diáspora dominicana con motivo de la conmemorar el Día Internacional de la Mujer. Desde ese momento observamos que esta artista maneja una gran creatividad en sus refrescantes obras abstractas, bajo efecto de gran espontaneidad amparadas en una confrontación espacio-forma. Nada en esta obra está pre-establecido, hay un manejo experimental que ella quizá involuntariamente logra por sus instintos muy femeninos.
La artista explica que: En mis obras, creo parodias, y escenas de humor y sátira, exagerando trazos e impulsos femeninos, exaltando al extremo los estereotipos y las situaciones femeninas.
Asegura que su obra está conectada también al expresionismo abstracto, y una expresión de ello es que cada día llega a su taller y sin bocetos ni ideas previas, aborda directamente el trabajo.
Me interesa el mundo de la mujer actual, y los roles que la definen y la guían. Me intriga los temas culturales que la constriñen o la determinan; el poder de la belleza, de la moda, del sexo, que la elevan o la disminuyen, creando situaciones exigentes y altamente competitivas, comenta la artista.
Asimismo, Rivera- Bond señala que con su trabajo trata de de construir el conocido Sueño Americano, de la belleza y de la vida perfecta: Estando bombardeados por anuncios publicitarios y propaganda, sea en fotos, revistas, películas, TV, o cualquier otro medio, en lo que debería ser el perfecto prototipo femenino, no puedo evitar el divertirme y al mismo tiempo, sentirme concernida con esta situación. Seamos realistas, todos somos producto de este lavado de cerebro.
Bond establece un diálogo radical con la pintura neo-expresionista alemana y con el bad painting europeo, que establecen la parodia y sátira figurativas. Sus trabajos, construidos con gruesas capas de óleo y resinas, muestran dislocados seres, entremezclados con materias industriales y objetos femeninos reciclados, señala la curadora, doctora Milagros Bello.
La expresividad de su obra se fundamenta ante todo en una poética de la coherencia entre el gesto, el color y el espacio para alcanzar une totalidad visual en obras de grandes formatos que muchos artistas como Pollock utilizaban como una manera de decir que sus procesos creativos no tienen límites, y que el espacio es un elemento relativo, pues se siente en cada obra una posibilidad de ir más allá del límite. Algunos elementos pueden ser evidenciados como un toque del kitch/glamour que encontramos en artistas como Charo Oquet y Edouard Duval Carrie, ambos caribeños residentes en Miami, quienes utilizan detalles visuales de joyas y lencería femenina que también ofrecen un toque genuino al nuevo realismo y al pop art.
Pero, es indiscutible, que todo este conjunto referenciado produce una obra de corte personal y singular con atrevimientos interesantes como la interacción con el público.
La sinfonía de los colores alcanza un gran equilibrio cromático que integra con medida los elementos visuales externos como los objetos y las fotografías.
La obra en su conjunto responde a mecanismos del gesto espontáneo con el ritmo y la medida de lograr un discurso visual construido y coherente, es una obra libre y investigadora de una poética visual muy personal que merece seguimiento e interés crítico en el conjunto de la producción artística dominicana de estos últimos 5 años.
Rosario Rivera-Bond, ofrece con esta muestra una nueva mirada hacia la pintura dominicana más reciente.
En síntesis
Rosario Rivera Bond
La muestra estará abierta al público en el Museo de Arte Moderno de la República Dominicana, localizado en avenida Pedro Henríquez Ureña, Plaza de la Cultura Juan Pablo Duarte, en horario de martes a domingos de 9:00 a.m. a 5:00 p.m. hasta el 22 de mayo.
Rosario Rivera-Bond reside entre Londres y Miami, estudió arquitectura y diseño de interiores en la Universidad Pedro Henríquez Ureña y luego se movió a París donde estudió artes en L Academie de la Grande Chaumiere, participando en colectivas importantes como las de Le Salon d Exhibition de Londres y en Camden Art Center. Con un importante periplo en el 2006 exhibe en Edge Zones y en Rave, Artformz de Miami, así como en Basel Miami. Al igual, que en otros proyectos como Projektraum M54, Basel, Switzerland.