El lifting facial japonés es un estiramiento no quirúrgico que tonifica el rostro, fortalece la fisionomía facial y mejora su aspecto al aumentar el flujo sanguíneo, drenaje linfático y el incremento de colágeno y elastina, importantes para tener una piel sana. De igual forma, trabaja profundamente la capa superior de la epidermis y los nervios faciales. Equilibra el sistema nervioso central y logra un balance entre rostro y cuerpo.
¿Cómo funciona? Es un tratamiento que estimula la capa superior de la epidermis y las terminaciones nerviosas, la musculatura subcutánea y los meridianos de la medicina tradicional china. Basa su eficacia en la combinación de diferentes técnicas de reflexología facial, lo que aporta además bienestar y relajación, incidiendo incluso en las emociones. En el rostro se tienen representados una serie de puntos que actúan sobre el sistema nervioso central y otros que están relacionados con el circuito de los meridianos. Esta compleja red interna regula muchos procesos corporales.
El objetivo del lifting facial japonés es estimular manualmente esas zonas reflejas para regular los órganos vitales, restablecer el equilibrio hormonal y normalizar el sistema nervioso.
Con el lifting , la piel de su rostro lucirá más joven y saludable.