El relevo en el voleibol femenino está más que garantizado, si se continúa laborando en las categorías menores. Un ejemplo de ello es que el pasado domingo la Selección de Voleibol Femenino Sub-23, retuvo por 5ta vez, al hilo, la corona de la Copa Panamericana. Venció 3-0 a México.
La criolla Madeline Guillén se llevó tres premios, (mejor servicio, mejor anotadora y segunda mejor atacante, además, del galardón de Más Valiosa. Con apenas 20 años, ya la atleta está enfocando sus miradas para abrirse paso-con salud y trabajo- en equipo de mayores.
Lo importante es que esa transición se realice sin ningún tipo de traumas y que el voleibol salga beneficiado. Todo a su tiempo. Igualmente, las centrales Geraldine González y Estefanny Rabit, tuvieron un gran desempeño en la Copa. Continuaré.