Hoy 
POR MARÍA MERCEDES
Cada persona mostró su mejor rostro. Y aunque no son magos ni poseen una varita mágica lograron recrear una historia real, que de haber sido un cuento de Hadas habría salido del sutil frote de la lámpara de Aladino.
Así, con un estilo desenfadado y una vestimenta acorde con la celebración, los socios del Club Empresarial Fiesta disfrutaron al máximo de la rumba carnavalesca que les organizaron los ejecutivos del Dominican Fiesta Hotel & Casino.
Desde las 7:30 p. m., George Pérez Sánchez, gerente de Relaciones Públicas esperaba a los invitados a la entrada del salón Ámbar con una amplia sonrisa, y con su original vestimenta de indígena, mientras los mozos les servían un coctel tropical del hotel al que denominan Banana Mambo.
A partir de ese momento todo fue alegría. Esas emociones convirtieron la festividad en un mar de risas cada vez que los protagonistas de este relato aparecían con sus disfraces de conejita, de bebé, bruja, gatita, anciana y el guerrero Aquiles, quienes con mucha espontaneidad posaron y sonrieron para las cámaras del periódico HOY.
En esta original gala, la música ocupó un lugar primordial, porque los presentes tuvieron la oportunidad de bailar al ritmo del carnaval con DJ y con los merengues interpretados por la orquesta de la Marina de Guerra.
Pero, eso no fue todo. También hubo tiempo para las sorpresas. Así es, pues al ritmo de sus contagiosos movimientos compactados con el sonido de sus cascabeles y con la repartición de vegigazos hicieron su entrada triunfal al salón los diablos cojuelos «Las Fieras», de La Vega. Estos pintorescos personajes, al igual que la comparsa de «Robalagallina», animaron aún más la gala.
El chef del hotel Emilio Liriano preparó un delicioso bufé especial para la ocasión, compuesto por carnaval del mar, arroz confeti, vegigazos de crema y otras delicias fueron saboreadas por los presentes.
Luego de la cena se procedió a premiar a las chicas y los chicos que lucieron los disfraces más auténticos e innovadores. Además se realizó la rifa que tuvo como premios: viajes a Europa, Estados Unidos y el Caribe, fines de semanas en resorts del país y cenas en restaurantes de lujo.
Esos fabulosos obsequios fueron las recompensas que muchas personas obtuvieron por su ingenio, creatividad, disposición e interés de pasar una noche fuera de febrero más que divertida, fuera de serie. Tal como es el carnaval de esta nación del Caribe.
