Por Jim Mannion
MOSUL, Irak, Feb 11 (AFP) – El secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld, afirmó el viernes en Mosul, ciudad rebelde del norte de Irak, que las tropas estadounidense podrán volver a casa «con honor», cuando los iraquíes sean capaces de derrotar a los insurgentes.

En una sorpresiva visita, Rumsfeld, la más importante personalidad de la administración norteamericana que visita Irak desde las elecciones del 30 de enero, destacó que la formación de las fuerzas iraquíes era la tarea prioritaria de los soldados estadounidenses.

Hablando ante varios centenares de soldados, entre ellos militares iraquíes, reunidos en el aeropuerto de Mosul, Rumsfeld advirtió que «ésto llevaría tiempo», pero que los iraquíes debían prepararse.

«A los iraquíes corresponde la tarea, con el tiempo, de derrotar a los insurgentes. Es su país, es su responsabilidad. Una vez que ellos (las fuerzas de seguridad) tengan la confianza y la capacidad, nuestras fuerzas, las fuerzas de la coalición, podrán volver a casa con honores», dijo.

El secretario de Estado llegó de Niza (sur de Francia) donde participó en la reunión de los ministros de Defensa de la OTAN sobre el entrenamiento de las fuerzas de seguridad iraquíes.

Rumsfeld fue inmediatamente a un hospital de campaña para condecorar a los soldados norteamericanos heridos.

El secretario de Defensa deseaba «reunirse con los comandantes (de unidades), agradecer a las tropas y reconocer el gran éxito de las elecciones iraquíes», declaró el portavoz del Pentágono Lawrence DiRita.

En el cuartel general de las fuerzas estadounidenses en Mosul, el secretario de Defensa hizo numerosas preguntas a los responsables iraquíes acerca de la seguridad en relación a las elecciones.

Estos últimos reconocieron que hubo dificultades para votar en Mosul y en la provincia de Nínive.

«La gran sorpresa, es que los habitantes de Mosul participaron (…) Esto fue un desafío a los terroristas», respondió un responsable iraquí a Rumsfeld.

El responsable estadounidense también viajó en helicóptero hacia una base donde se entrenan en condiciones reales las fuerzas de policía encargadas de la lucha anti-terrorista.

Mosul ha sido escenario de numerosos actos de violencia que provocaron la deserción de la mayoría de los policías locales y la celebración de las elecciones generales en condiciones caóticas.

En diciembre, 22 personas, entre ellas 14 soldados estadounidenses, fueron muertos en Mosul en un atentado contra una base norteamericana y Rumsfeld había llegado hasta el lugar para informarse sobre el ataque.