Rusia suspende sus vuelos a Egipto y decide evacuar a sus turistas

Rusia suspende sus vuelos a Egipto y decide evacuar a sus turistas

Foto de un Boeing 777 de Malaysia Airlines despegando del aeropuerto internacional de Los Ángeles, el 15 de noviembre de 2012. El avión, con número de cola 9M-MRD, es el mismo que iba de Ámsterdam a Kuala Lumpur el jueves 17 de julio de 2014 y que fue derribado cerca de la frontera entre Rusia y Ucrania, con 295 personas a bordo. (AP Photo/JoePriesAviation.net)

  Moscú, Rusia.- Rusia suspendió hoy todos los vuelos a Egipto a la espera de que se conozcan las causas del siniestro del Airbus A-321 que se estrelló hace casi una semana con 224 personas a bordo, y decidió evacuar a los cerca de 50.000 turistas rusos que se encuentran allí.

En medio de las crecientes sospechas del Reino Unido y EEUU de que el avión sufrió un atentado, el Servicio Federal de Seguridad FSB (antiguo KGB) recomendó la suspensión de los vuelos al país árabe en una reunión extraordinaria del Comité nacional antiterrorista.

“Hasta que no determinemos las verdaderas causas de lo ocurrido, considero conveniente suspender los vuelos de la aviación rusa a Egipto, y esto se refiere sobre todo a los canales turísticos”, dijo el jefe del FSB, Alexánder Bórtnikov.   Poco después, el Kremlin anunció que el presidente Vladímir Putin daba luz verde y ordenaba poner esa medida en práctica.

“El jefe de Estado estuvo de acuerdo con esta recomendación y encargó al Gobierno ponerla en práctica, así como garantizar el regreso al país de los ciudadanos rusos” que se encuentran en Egipto, dijo el portavoz presidencial, Dmitri Peskov.   “El presidente también ordenó coordinarse con la parte egipcia para garantizar la seguridad de la comunicación aérea”, agregó.

Aunque Moscú repite insistentemente en los últimos días que “no se descarta ninguna hipótesis pero es necesario esperar a los resultados” de la investigación, la decisión de suspender los vuelos a Egipto -ya adoptada por otros países- parecía inevitable.

Putin recibió ayer una llamada del primer ministro británico, David Cameron, después de afirmar en Londres que no hay “certeza” de que el avión explotara en el aire por un artefacto explosivo, pero que sí parece cada vez “más probable».

Aunque según el comunicado oficial del Kremlin Putin le dijo al premier británico que hay que operar con los datos que arroje la investigación oficial, no se descarta que Cameron entregara al líder ruso alguna información relevante.

Antes de dar su opinión, el jefe del FSB insistió en que “necesitamos tener datos absolutamente objetivos y confirmados sobre las causas del siniestro del avión”, y dijo que “este trabajo debe hacerse de la manera más escrupulosas y durante todo el tiempo que sea necesario».

Aún no se ha informado cuando entra en vigor la medida, pero dado que el presidente ordenó repatriar a los ciudadanos rusos que ya se encuentran en Egipto no parece lógico que salgan más vuelos en esa dirección.   El portavoz Peskov dijo que estos se reanudarán cuando las partes puedan “garantizar la seguridad de los vuelos y de los procedimientos previos” al embarque.

También dejó claro que la suspensión no afecta solo a los destinos turísticos del de Marzo Rojo, como Sharm El Sheij y Hurgada, sino a todos los vuelos a y desde Egipto, incluido El Cairo.   La decisión tiene fuertes implicaciones tanto políticas como económicas.

La posibilidad de que se confirme que una bomba derribó el avión ruso daría razones a los críticos en el país de la intervención rusa en Siria, y en el terreno económico es innegable el impacto en la industria turística, ya afectada por la crisis.

Según distintas estimaciones, entre 40.000 y 50.000 turistas rusos se encuentran actualmente en Egipto, especialmente en las localidades de Sharm El Sheij y Hurgada.   “Según los turoperadores, en Egipto se encuentran ahora 50.000 turistas rusos”, dijo Irina Tiurina, portavoz del sindicato ruso de Industria Turística.   “Teniendo en cuenta cuantos vuelos al día pueden aceptar los aeropuertos de Hurgada y Sharm El Sheij, y cuantos pasajeros puede transportar un avión, se necesita al menos un mes para sacarlos a todos”, añadió.

Tiurina aseguró que los turoperadores no podrán reembolsar la totalidad del dinero a los turistas que se vean obligados a cancelar sus viajes a Egipto ya que eso significaría “la quiebra” para muchas agencias.

Según datos de la Agencia federal de Turismo, Rosturisma, en lo que va de año han visitado Egipto 2 millones de turistas rusos y el país árabe es el segundo destino extranjero preferido por los rusos después de Turquía.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas