Un espacio para encontrarse con la naturaleza dominicana. De eso se trata el Museo Nacional de Historia Natural, el cual, recientemente adquirió el nombre de Profesor Eugenio de Jesús Marcano.
Con el objetivo de mantener colecciones científicas representativas del patrimonio natural de la República Dominicana, realizar investigaciones que contribuyan a la conservación de la biodiversidad de la isla y el Caribe insular y educar a la comunidad sobre el mundo natural, se creó este museo.
Entrar en él es adentrarse a las especies de flora y fauna que caracterizan la región.
Su misión: realizar investigaciones científicas dirigidas a la conservación de la biodiversidad y educar a la comunidad sobre el mundo natural a través de exhibiciones museográficas.
Cuenta con una riqueza excepcional e ideal para quienes deseen conocer este magnífico mundo. Tiene siete salas: Gigantes Marinos, Sala del Universo, Sala de La Tierra, Sala de Minerales y Rocas, Sala de Ecología, Sala de Las Aves y Sala de Biogeografía.
Exhibiciones. Para el disfrute de sus visitantes, el Museo Nacional de Historia Natural posee varias exhibiciones permanentes: Buche Inolvidable, una exposición de la piel de un chimpancé que vivió durante largos años en el antiguo parque zoológico.
El Recurso Agua. Exhibición, dedicada al agua como recurso natural.
Los Fósiles. Exhibición de una muestra de fósiles en su mayoría invertebrados sedimentados en ambientes marinos.
El Ámbar. Muestra el ámbar dominicano, sus características y procesos de extracción.
Los Tiburones. Con varias especies de tiburones y estilos de vida de estos interesantes y poco entendidos habitantes del mar.
Los Insectos. El más exitoso grupo de animales en términos evolutivos: los insectos. Y cerca de un millón de especies conocidas.