Prevenir. Muchos expertos coinciden en recomendar el aceite de oliva como fuente de grasa cardiosaludable. En este punto, la Organización Mundial de la Salud ofrece estas recomendaciones: Las grasas deben aportar el 30-35% de la energía diaria.
Las grasas saturadas (mantequilla, embutidos, bollería industrial o frituras) deben aportar como máximom el 10%.
Los ácidos grasos poliinsaturados (aceites vegetales, de semillas y derivados como los de la margarina) deben constituir el 6-10%.
Los ácidos grasos trans (galletas, golosinas, cereales y bollería) no deben superar el 1%. El resto de las grasas debe completarse con monoinsaturadas, dentro de las que se encuentra el aceite de oliva.