El cantautor español Joaquín Sabina se encuentra “estable”, aunque permanece ingresado en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ruber Internacional de Madrid, según el parte médico difundido a mediodía de ayer.
El intérprete de “Y nos dieron las diez” y “19 días y 500 noches”, fue operado en la mañana de ayer para realizarle una “evacuación de hematoma intracraneal en hemisferio derecho”. Son los términos médicos para referirse al “pequeño coágulo” en el cráneo que se le produjo al caerse de forma accidental, en la noche del miércoles, del escenario del Wizink Center, mientras cantaba con Joan Manuel Serrat en el cuarto concierto de la gira la gira “No hay dos sin tres”, que hacen juntos.
El diario “El Mundo”, de España, publicó ayer que el artista se encuentra acompañado de su familia y seguiría “48 horas en observación”. La caída tuvo lugar alrededor de las 21.00 horas, 30 minutos después de comenzar el recital, que finalmente fue suspendido y aplazado para el próximo 22 de mayo.

Sabina se precipitó al menos metro y medio hasta caer al foso. Todo apunta a que el músico “perdió pie” y por eso se cayó. “Lo más probable es que no viera el final del escenario”, dijo “El Mundo”. Hacia las 21.40 horas, el propio Sabina salió en silla de ruedas al escenario, acompañado de Serrat, para anunciar al público que se iba al hospital porque se había hecho daño en un hombro.