EFE, REPORTAJES.- Cada hogar tiene un antes y un después de que un interiorista haya pasado por ella. De cada rincón se puede sacar provecho, y así nos lo demuestran.

Un pequeño retoque aporta brillo y esplendor al lugar más inhóspito. Una casa desvencijada cambia por completo, no solo con una capa de pintura, sino también con pequeños detalles que nos permiten sacarle un partido que a priori no vemos.

Dara Díaz, fundadora de Nice Home Barcelona y especialista en decoración de interiores, sabe qué es lo que se puede hacer, tanto en espacios reducidos como en una vivienda de muchos metros cuadrados.

Según comenta, “lo más importante es conocer las necesidades que tiene cada persona en su vivienda. Cada cliente, antes de solicitar un presupuesto para una pequeña reforma, debería analizar cuáles son sus prioridades”. También añade que, normalmente, no se cuenta con grandes presupuestos para reformas, por lo que a la hora de invertir el dinero “tiene que ser exactamente donde el cliente lo necesita para que el resultado final resuelva sus necesidades reales”.

Asegura que, en sus año de experiencia, lo que más han pedido los clientes es “organización y espacio para el almacenaje. La mayoría de gente no cuenta con grandes casas”. Sin embargo, otros se decantan por una estética bonita, pero funcional.

Nuevos acabados, nueva vida. “La apuesta general es conservar el mobiliario que ya hay, dándole vida con nuevos acabados o combinándolo, con diseños “low cost”, y aportando complementos decorativos, el alma de la decoración”, dice la diseñadora.

“El orden, los acabados en tonos claros, tanto en pintura, carpintería, y mobiliario, más unos complementos decorativos bonitos y acertados para cada espacio, hacen milagros”, explica la decoradora.

Recomienda dejarse aconsejar por un especialista, “es más barato de lo que se cree y lo más útil para no cometer errores”. También indica que, lo ideal, es tener claro cuánto se puede gastar en la reforma y en función de ese presupuesto se preparan las propuestas, “para que no haya sorpresas desagradables”.

Ultimas reformas. Además de decoración de interiores, Nice Home Barcelona se especializa en “home staging”, un sistema muy asentado en Estados Unidos que consiste en mejorar la primera impresión de una vivienda para su venta o alquiler, es decir un lavado de cara a la casa. Sus últimas reformas han sido en un ático de 90 metros cuadrados rodeado de terrazas, “pero aparentemente sin luz ni calidez, y ningún estilo; y una vivienda de 150 metros cuadrados, “poco organizada y recargada a pesar de sus gran potencial y espacio”.

En el primer espacio sus dueños querían ganar luz y dar mayor calidez a la vivienda, teniendo en cuenta que es totalmente exterior y la luz no penetraba, entre otras causas por ser los cristales antiguos y con terminación opaca en tonos anaranjados, que “no dejaban traspasar la maravillosa luz”, dice la interiorista.

Los suelos eran en tonos oscuros y negros; las luces muy poco cálidas, con fluorescentes, que “transmitían una luz muy fría, y un cuarto en medio del pasillo sin luz natural y sin ningún sentido”.

Despejar espacios. “Conseguimos organización, despejar y armonizar los espacios, pues en él se habían acumulado demasiado objetos, lo que le daba un aspecto desordenado, recargado y, por tanto, no transmitía todo su encanto”, indica la especialista.

Se aprovechó el hall de entrada para poner un pequeño sofá “que tenía la propietaria y no sabía qué hacer con él, así creamos una fantástica zona para poder leer, relajarse o sentarse cuando esperas para salir de casa”, dice Dara Díaz.

En la amplia vivienda desaprovechada tenían como objetivo ganar luz, calidez y demostrar el potencial real de la vivienda.

En los dos casos, según explica la interiorista, con pequeños cambios y un presupuesto ajustado “se ganó muchísimo”.

Luz, elemento fundamental. Dara Díaz asegura que la luz es fundamental para crear espacios más atractivos y ganar en amplitud.

Destaca que “es fundamental conocer con qué tonalidades hay que jugar, qué tipo de textiles utilizar y qué luces extras poner para que el resultado final sea el correcto”.

A priori, señala que hay reformas más fáciles que otras. Detalla que existen viviendas que cuentan ya con mucha luz exterior, espacios bien distribuidos y una buena base donde trabajar, En otras, en cambio hay que empezar desde cero, ya que no cuentan “ni con luz natural ni con una buena distribución, son más complicadas, pero nos encantan los retos”.

Concluye que la satisfacción del cliente es el auténtico premio.