En el hospital Doctor Luis Eduardo Aybar (Morgan) se trabajaba ayer en el traslado de los últimos pacientes que son referidos a otros centros de salud del Estado, para dar paso a la construcción de la obra ya iniciada, que convertirá a esa ciudad sanitaria en una moderna torre de siete plantas, con los servicios médicos más avanzados.

La promesa del presidente Danilo Medina es concluirla en un año y medio, lo que dudan algunos médicos, pacientes, empleados y, sobre todo, vendedores del entorno del Aybar en el sector María Auxiliadora del Distrito Nacional, quienes dicen que nunca se ha construído una obra hospitalaria en tan corto tiempo.

Médicos y enfermeras están divididos. Unos creen que la obra sería terminada en esa fecha y otros que no.

Pero el director del hospital, Manuel Méndez, entrevistado ayer por redactores de Hoy, afirma que la sede hospitalaria tendrá un ritmo acelerado. Méndez se movilizaba entre las paredes vacías del hospital, el que ha sido vaciado casi por completo.

En medio del trajinar, eran recogidos los equipos médicos, desocupaban las salas y se hacen acuerdos con el personal que será distribuido entre los demás hospitales.

El director, quien alrededor de las 11:00 de la mañana inspeccionaba las labores desde la puerta del Aybar, aseguró que el 20 de diciembre entregan la edificación, la que le será devuelta en unos 18 meses.

El personal de enfermería indicó que sus puestos están garantizados en otros hospitales, pero un grupo de empleadas de emergencia protestaba porque no les reanudaron sus contratos y vendedores y taxistas de las proximidades lamentan que el cierre del Aybar signifique la pérdida de sus ingresos económicos diarios.

Cada quien gestiona lo suyo aquí. El doctor Méndez declaró a Hoy que ayer estaban en los procesos de colocación de pacientes y distribución del personal.

Una parte de los pacientes, dijo, el doctor Méndez, va a los hospitales del sistema: Doctor Francisco Moscoso Puello, Docente Padre Billini, Maternidad Nuestra Señora de La Altagracia, traumatológico Doctor Ney Arias Lora, en Santo Domingo Norte, y el hospital Doctor Vinicio Calventi, de Los Alcarrizos.

Desde la

Dirección Administrativa, ubicada en otro lugar, el doctor Méndez va a coordinar y darle seguimiento a las situaciones que se presenten.

Personal médico. Méndez explicó que identifican a los médicos, enfermeras y personal técnico.

De los equipos, dijo que los inventariaron y almacenaron, para llevarlos a otros hospitales. Desde que asumió la gerencia del Aybar el 5 de junio, cuando el Ministerio de Salud Pública lo intervino, Méndez, de especialidad ginecólogo, tiene a su cargo 500 médicos y 1,900 empleados, que incluyen más de 400 enfermeras, personal técnico y administrativo.

La edificación tendrá cinco pisos hacia arriba y dos soterrados para estacionamientos. “Este centro tendrá las últimas tecnologías del mundo médico”. La obra la construye la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe).

La base de datos digitalizada acompañará a cada paciente en su viaje de ida y de retorno al Luis E. Aybar.

Nuevos centros. Este complejo hospitalario lo integrará un hospital clínico quirúrgico y un hospital materno infantil, de referencia nacional y se espera que se incrementen las 15 cirugías que se practican por día.

Protesta silenciosa. Un grupo de mujeres, que forman parte de unas 20 empleadas conserjes y del aseo del área de la Emergencia, se manifestaba de manera pasiva por los pasillos del Aybar, en reclamo de que no se les cancele, sino que se les reubique en otros hospitales, igual que a los médicos y enfermeras.

La protesta la encabezaron Ercilia Reyes, Minerva Arias, María Mercedes Piña y Paola Bueno Cornielle. No queremos que nos manden a la calle con el cheque de la liquidación; queremos que nos reubiquen”.

Comerciantes del derredor. Laboratorios, algunos reconocidos, y farmacias que se instalaron en la zona por la afluencia de pacientes en el hospital Aybar, dicen que tendrán inconvenientes.

El descontento más evidente era de Estéfany Vólquez, del colmado cafetería El Punto. Lamenta que deban cerrar a las 8:00 de la noche, ya que sin el Aybar, los pueden atracar.