SANTIAGO. Un sacerdote de esta ciudad declaró ayer que los niños necesitan cariño y respeto para poder desarrollarse, no importa si están enfermos o no, porque su cuerpo y su ser están unidos en el Señor Jesucristo.
Aquí en esta misa no hay que pedir súplicas a Dios por los que han muerto o por los que están enfermos. Ellos son ángeles. Al contrario, los niños son los que deberían orar por nosotros, porque ellos están limpios de alma. Pero hay una cosa que ellos necesitan en abundancia, es el cariño y el respeto, expresó el padre Beltrand Lessard, de la iglesia Nuestra Señora de la Altagracia.
El religioso pronunció una homilía en la misa en el patio del hospital infantil Arturo Grullón, de esta ciudad, en recordación de los niños y niñas que han fallecido a causa de esa enfermedad.
El acto religioso, con motivo del Día Internacional de los Niños con Cáncer, fue a intención del Voluntariado Jesús con los Niños, al término del cual lanzó numerosos globos amarillos. A la actividad asistieron decenas de familiares amigos y amigos de niños fallecidos.
En la actividad las voluntarias compartieron la alegría de ver como los niños se integraban a la actividad, demostrando su fuerza de voluntad.
Por su lado, la doctora Luisa Collado, de la Unidad de Oncología del hospital, dijo que no prestar atención a los síntomas para diagnosticar el cáncer a tiempo y abandonar el tratamiento médico son las causas que permiten la evolución de la enfermedad.
Dijo que a nivel mundial el 70% de los casos se cura, aunque demandan tiempo y sacrificio.
Resalta programa
La doctora Collado resaltó los esfuerzos que realiza el hospital Arturo Grullón para combatir esta enfermedad, mediante programas de cobertura asistencial en este centro de salud, a través del Voluntariado Jesús con los niños, cuyo equipo es liderado por la señora Vilena Comas de Stern. Señala que apoyar a los niños y niñas de escasos recursos es una de las iniciativas más ambiciosas del programa.