Hoy 
Puerto Plata. El párroco de la catedral San Felipe, de esta ciudad, Santiago Rodríguez, consideró que el servicio energético es la peor plaga que azota a la República Dominicana.
El sacerdote dijo que las personas pobres y necesitadas de barrios y las comunidades son las que más sufren con este sistema energético, que es el peor desastre que podemos tener los dominicanos.
Expresó que además de los apagones, las facturaciones que se reciben en los hogares de los diferentes segmentos de la sociedad son cada vez más altas, mientras que el servicio de energía eléctrica se torna precario en nuestro país.
Indicó que en esta ciudad se están produciendo apagones de 15 y 20 horas, pero al final de cada mes nos están enviando facturas de cobros por un servicio que no recibimos con regularidad, que nos desesperan porque su monto va más allá de lo que ganamos mensualmente.
El sacerdote dijo que esta situación nos desespera, nos indigna y nos convierte en seres impotentes.
Rodríguez reveló que las actividades religiosas, especialmente las misas y cultos religiosos han tenido que ser suspendidas en horas nocturnas a causa de los apagones que sufre esta provincia.
Puso como ejemplo que los estudiantes de la parte Oeste de esta ciudad tienen que regresar a sus hogares sin recibir docencia, ya que la mayoría de los liceos solamente imparten docencia en horas nocturnas, porque los jóvenes tienen que trabajar de día para ganar el sustento.
Dijo que la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales constituye un verdadero caos en este país, ya que ha fracasado en resolver el problema energético que por años nos ha tocado vivir.
Antecedentes
El sacerdote Santiago Rodríguez dijo que a raíz de la designación del ingeniero Celso Marranzini la población se sintió esperanzada de que el servicio de energía eléctrica iba a mejorar, pero ha sido lo contrario, por lo que en diferentes sectores de la población se han producido protestas. Indicó el sacerdote que las protestas no han sido sólo por el incremento de los apagones, sino también por las altas facturaciones que reciben los usuarios del servicio.
