NEIBA, Baoruco.- El Gobierno tiene que definir qué es lo que va hacer con las personas de las provincias Independencia y Baoruco, afectadas por la crecida del lago Enriquillo.
Esa es la opinión del sacerdote Frank Féliz, vicario general de la diócesis de Barahona, quien dijo que cada día se viven momentos más difíciles.
La situación del lago necesita mucha atención por parte de las autoridades. Tienen que ir en auxilio de la gente, expresó.
El religioso manifestó que las autoridades les hacen caso en algunos momentos a ese problema, pero después se olvidan de lo que ocurre en todo el entorno.
Féliz dijo que tras el paso de la tormenta Isaac la situación se ha agravado. Pidió la reubicación de los miles de afectados.