Sacerdotes de parroquias de la capital y de la provincia Santo Domingo afirmaron ayer que el país se encamina hacia una hecatombe por los altos niveles de corrupción, el narcotráfico, los apagones, la benevolencia de la justicia y la falta de políticas de desarrollo que hace  cada vez más pobres a la mayoría de la población.

Fray Santiago Bautista, de la iglesia Paz y Bien del Ensanche Ozama, Fray Demetrio de la Cruz, de la zona colonial y Alfredo Montaño, de  Capotillo, dijeron en rueda de prensa que los problemas se agravan porque las autoridades no actúan con responsabilidad en sus obligaciones.

Batista expresó que en el caso de la justicia es complaciente con los delincuentes y se preguntó cómo es posible que las autoridades no hayan podido dar  con el paradero de Sobeida Féliz.

“Todo esto afecta a la familia al igual que los prolongados, y perdonen la expresión, de los azarosos apagones, todo esto va creando mucha indignación en este pueblo dominicano y todas estas cosas crean violencia”, alertó el sacerdote.

Afirmó que ahora el país  está más pobre que hace cinco años porque falta voluntad política por parte de los gobiernos y una mano dura que gobierne, que frene la corrupción  y aseguró  que “estamos en  un Estado fallido  que se queda corto ante lo que está pasando”.

Alarmante.  Fray Demetrio de la Cruz, cuenta  que como sacerdote que celebra misas en diversos barrios  nunca había visto una situación de violencia y de preocupación  como la que ahora se expresa en la descomposición de la familia.

Llama a poner atención a esa situación.