POR MANUEL JIMENEZ
El gobierno dijo anoche que el salario real de los dominicanos ha aumentado en un 23 por ciento en relación al mes de agosto del 2004, pero reconoció que las medidas fiscales en curso han impedido que ese incremento sea percibido efectivamente por el consumidor.

Héctor Valdez Albizu, gobernador del Banco Central, hablando en presencia del presidente Leonel Fernández, recordó que el gobierno se vio en la necesidad de implementar una reforma fiscal que, entre otras cosas, aumentó el Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados, ITBIS, de un 12 a un 16 por ciento, el impuesto selectivo a las bebidas alcohólicas y tabaco, así como la Comisión Cambiaria.

“Ha habido una serie de medidas de corte fiscal que ha impedido que la disminución (en el costo de la vida) sea mayor que la esperada en término del efecto del tipo de cambio y lógicamente en los índices que hemos estado dando de los precios”, dijo Valdez Albizu.

Sin embargo, el funcionario manifestó que si se comparan los precios vigentes al mes de agosto del 2004 con los que rigen en la actualidad, “se determinará que hay una amplia gama de productos que han bajado de precios, de acuerdo a las encuestas que hacemos”.

El gobernador del Banco Central habló en respuesta a preguntas del presidente Leonel Fernández, en el inicio del espacio “La Agenda del Presidente”, transmitido anoche de manera diferido por una cadena de radio y televisión que tuvo como planta matriz a Teleantilales, canal 2. Fernández estuvo acompañado de su gabinete económico.

Valdez Albizu reiteró que de acuerdo a los datos del Banco Central, el salario real de los dominicanos se ha incrementado en un 23 por ciento en relación a agosto del 2004.

El presidente Fernández, al intervenir en el espacio televisivo, aclaró que la propia Federación Dominicana de Comerciantes (FDC) ha asegurado en varias ocasiones que más de 4,000 productos de amplia demanda han bajado de precios en los últimos meses.

“Yo creo que ha habido un aumento significativo en la calidad de vida del pueblo dominicano, por efecto de la baja de la tasa de cambio y de los precios”, dijo Fernández.

El gobernador del Banco Central, de su lado, expresó que ha habido, en términos reales, un aumento del poder adquisitivo del peso, dando mayor capacidad de compra a los consumidores en bienes y servicios.

“Pero la preocupación es que la gente entiende que debió haber sido mayor, pero ha sido una combinación de efectos monetarios con efectos fiscales”, dijo Valdez Albizu, quien incluso recordó que cuando en octubre del año pasado se aprobó la reforma fiscal, los economistas vaticinaban un aumento de precios de un 5 por ciento, pero fue negativo en ese mes. “Es decir, que la inflación fue negativa”, reiteró el funcionario.

En la primera entrega del espacio “La Agenda del Presidente”, coordinado por Ellis Pérez, intervinieron, además del presidente Fernández y Valdez Albizu, los secretarios, de Finanzas, Vicente Bengoa y Técnico de la Presidencia, Temístocles Montás; así como el superintendente general de Bancos, Rafael Camilo.

En el espacio, dedicado a analizar el desempeño económico del presente gobierno en los últimos nueve meses, las autoridades económicas tocaron también el tema de la crisis bancaria que estalló en el año 2003 y estuvieron de acuerdo en que la mala actuación de las autoridades pasadas, fue la causa principal del detonante de este problema.

Valdez Albizu dijo que la administración del ex presidente Hipólito Mejía manejó tan inadecuadamente la crisis, que emitió unos RD$110,000 millones inorgánicos para socorrer a los ahorrantes de los bancos quebrados, con lo que provocó el aumento de la tasa de cambio y colocó en una situación de déficit cuasifiscal al Banco Central.

A su vez, el secretario de Finanzas, Bengoa, destacó que a los pocos meses de la administración de Mejía, la tasa de cambio había subido a un 18 por ciento y al estallar la crisis bancaria ya estaba en un 26 por ciento, pese a que cuando recibió el gobierno en agosto del 2000, el tipo de cambio apenas llegaba a  RD$16 por US$1.

De su lado, el superintendente general de Bancos, Rafael Camilo, dijo que la administración del presidente Fernández se vio compelida a disponer medidas de carácter fiscal desde sus inicios, porque el gobierno de Mejía en su último año gastó RD$22,000 millones más de lo que estaba presupuestado.

“Tuvimos que aumentar los impuestos para equilibrar la política fiscal, porque si no hacíamos eso, nos desbalanceábamos nuevamente y habría que recurrir a recursos internos o externos”, explicó Camilo.

Pero añadió que la política fiscal y monetaria puesta en marcha por las actuales autoridades, no sólo bajó el costo de la vida, sino que ahora la gente compra con RD$100 lo que compraba antes con RD$123.