El sofocante calor que impacta al país en las últimas semanas tiene un efecto importante sobre la salud cardiovascular. El Ministerio de Salud y la doctora Elaine Nuñez, cardióloga electofisióloga se refieren al tema y recomiendan a la población no ejercitarse en horario de extremo calor.

El Ministerio de Salud a través de su cuenta de Instagram hace recomendaciones puntuales ante la ola de calor y el impacto del polvo del Sahara.

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Cuidar el corazón

El calor puede tener varios efectos en la salud cardiovascular, especialmente durante períodos prolongados de exposición a temperaturas elevadas o durante olas de calor. Algunos de los impactos más significativos incluyen, aumento del estrés en el sistema cardiovascular. Las altas temperaturas pueden aumentar el estrés en el sistema cardiovascular al provocar vasodilatación periférica y una mayor demanda de sangre para enfriar el cuerpo. Esto puede aumentar la carga sobre el corazón y la presión arterial, especialmente en personas con enfermedades cardiovasculares preexistentes, dijo Nuñez.

Desencadenantes

El calor sofocante puede ser un desencadenante para enfermedades cardiovasculares preexistentes. El calor extremo puede desencadenar episodios de enfermedades cardiovasculares preexistentes, como la angina de pecho, el infarto de miocardio o la insuficiencia cardíaca. Esto se debe a que el aumento del estrés en el sistema cardiovascular puede exacerbar la isquemia miocárdica y la sobrecarga del corazón, insiste la profesional.

Descompensación

El calor puede provocar la descompensación de personas con insuficiencia cardíaca, establece. Las altas temperaturas pueden dificultar la capacidad del corazón para compensar la insuficiencia cardíaca, ya que el cuerpo trabaja más para mantener la temperatura corporal dentro de límites normales. Esto puede conducir a un empeoramiento de los síntomas de la insuficiencia cardíaca, como la disnea y la fatiga, asegura Nuñez.

El calor extremo puede aumentar el riesgo de arritmias cardíacas, como la fibrilación auricular o las taquicardias ventriculares, especialmente en personas con predisposición a este tipo de trastornos. La deshidratación y los desequilibrios electrolíticos asociados con el calor pueden contribuir a la aparición de arritmias. Las personas pueden exponerse a un mayor riesgo de accidente cerebrovascular debido a la deshidratación, la vasodilatación periférica y la activación del sistema nervioso autónomo.

Recomendaciones

La especialista Nuñez pide evitar el ejercicio extenuante al aire libre. Durante olas de calor, es importante limitar la actividad física extenuante al aire libre, ya que puede aumentar la carga sobre el corazón y la presión arterial. Optar por ejercicios más suaves en interiores o en momentos más frescos del día puede ser una alternativa más segura. Asimismo, se recomienda. beber suficiente agua, es fundamental para compensar la pérdida de líquidos debido a la sudoración. Es importante aumentar la ingesta de líquidos durante períodos de calor extremo y evitar el consumo excesivo de alcohol y cafeína, ya que pueden deshidratar