La ministra de Salud Pública, Altagracia Guzmán Marcelino, instruyó ayer a las clínicas y hospitales del país a cumplir con la Ley 8-95 que promueve la lactancia materna y prohíbe la distribución de fórmulas para lactantes en los centros de salud.
Junto a funcionarias de la Comisión Nacional de Lactancia Materna, dejó inaugurada una sala para que se ordeñen las empleadas del organismo que requieran el área para extraer la leche.

La ordenanza del ministerio incluye al Servicio Nacional de Salud (SNS), entidad encargada del funcionamiento de los centros del Estado.

Las cartas con las instrucciones fueron remitidas al presidente de la Asociación Nacional de Clínicas Privadas (Andeclip), Rafael Mena, y al director ejecutivo del Servicio Nacional de Salud, Nelson Rodríguez Monegro.

Sala de lactancia. El Ministerio de Salud Pública instaló la sala de lactancia materna para las empleadas que lo requieran. Se trata de un espacio confortable en el que las madres pueden extraer el alimento que mantendrá saludables a sus hijos.

En el acto participaron la representante en el país de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Alma Morales; la ministra Guzmán Marcelino y la doctora Clavel Sánchez.

La alegría se veía reflejada en los rostros de las empleadas, quienes agradecieron que les habilitaran un espacio al que por ley tienen derecho.

Bajo costo La doctora Guzmán Marcelino expresó que con un costo de instalación muy bajo, ahora las empleadas del ministerio disponen de un espacio adecuado e higienizado, con los insumos que necesitan para poder lactar a sus hijos de manera exclusiva hasta cumplir los seis meses de vida sin tener que movilizarse a sus hogares y seguir el aumento de su producción.

“Son innegables los aportes de la lactancia materna exclusiva a los niños y también para las madres durante los primeros seis meses de vida del bebé. La leche materna constituye el mejor alimento infantil. Es el más equilibrado y contiene todos los nutrientes necesarios para el correcto desarrollo del recién nacido”, explicó la ministra Guzmán Marcelino.

A imitar el buen gesto. Guzmán Marcelino manifestó que todas las instituciones públicas y privadas del país deben tener una sala de lactancia, para que sus empleadas tengan la facilidad en espacio higienizado y ambientado para lactar a sus bebés.
“La del ministerio se instaló con menos de 500 mil pesos y espero que instituciones públicas y empresas privadas hagan lo mismo”, dijo.

En tanto, la doctora Clavel Sánchez, directora ejecutiva de la Comisión Nacional de Lactancia Materna, destacó que en 2016 fue definido un nuevo conjunto de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) basados sobre los “asuntos pendientes” de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, los cuales guiarán los programas de desarrollo a 15 años.

Los pequeños que son lactados por sus madres tienen menos posibilidades de enfermar, aseguran pediatras, quienes afirman que que baja la mortalidad.