Decir comunicación sexual,  es referirse a ese diálogo y mutuo interés de la pareja por la plenitud sexual de ambos.

Compartir la intimidad, no siempre es fácil, me comentaba una amiga, que su relación sexual con su pareja en los primeros meses y hasta el nacimiento de su hija, era  muy satisfactoria. 

“Yo pensaba que era una mujer sexualmente feliz, pero un día, haciendo el amor con mi marido, tuve mi primer orgasmo” “y sabes?”  ¨fue tanto el coraje que sentí, que le entré a trompadas¨, yo, no entendía,  hasta que me dijo: ¨oye, ese pe….., se pasó años haciéndome el amor y yo creía que estaba disfrutando, las trompadas, se las di, porque me sentí traicionada e ignorante ¨… ¨ después de tantos años ¨

Así es,  juntos por años, sin interesarse de las necesidades sexuales del otro y olvidando el tipo de caricias o besos que estimulan a su pareja.  Desconociendo zonas erógenas.  Sin saber si se logra o no un orgasmo.  Sin propiciar una “cumbre” sobre estos temas para  lograr una comunicación sexual armoniosa. 

Un buen dialogo sexual, podría depender de la buena o mala educación sexual que haya tenido la pareja, así como del rol social que ha tenido el hombre o la mujer dentro de la sociedad. En ambos casos, machista él, sumisa ella, continúan perpetuando una conducta que les inhibe y lacera sus capacidades  de dar y recibir afectos.

Para lograr una buena comunicación sexual, podríamos tomar en consideración las características de un buen diálogo; gestos, entonación y actitud, espontaneidad y uso de frases simples.

Con estos elementos, sin dudas lograremos, asimilar, respetar, escuchar y pensar en nuestra pareja.