Raúl Hernández, es un amigo virtual que radica en Los Estados Unidos, miembro del Grupo de Desarrollo Humano y Personal de Emagíster, al cual pertenecemos.
En uno de los debates reciente, Raúl, nos hacia las siguientes preguntas: ¿En dónde se han quedado los buenos modales y el respeto a nuestros semejantes?
¿En dónde ha quedado la sonrisa franca y sincera que teníamos hace un tiempo?
Cuestionamientos validos, que se responden en la actitud de los ciudadanos del mundo actual y que bien sintetiza con una metáfora José Luis García Ortega, Encargado de Energía de Greenpeace: señala:
Si una rana cayese en un cazo de agua caliente, inmediatamente saltaría hacia fuera.
Sin embargo, se dice que si la rana estuviese ya en el cazo, en agua fría, y poco a poco lo fuésemos calentando, la rana permanecería adentro, incapaz de percibir el peligro del calentamiento lento y progresivo. Cuando el agua hirviese, la rana continuaría allí; pero muerta.¨
Desde un sentido humanista, son los valores lo que hacen que un hombre sea tal, sin lo cual perdería la humanidad o parte de ella.
Partiendo de esa premisa, creo firmemente que los valores no se han perdido, que habitan en cada uno de nosotros, pero que debemos identificar cuales poseemos y se encuentran debilitados.
Cuales están brillando por su ausencia y cuales queremos alcanzar, para entonces, fortalecerlos y permitir que afloren como una responsabilidad de vida y del bien común, que nos manda a vivir en paz como buenas hermanas (os) y a no perecer como la rana adaptada a un calor que deshumaniza.