Son un grupo de seres vivos diferentes a las plantas y los animales, por lo que se clasifican en un reino aparte llamado Fungi. Se denomina micosis a las enfermedades producidas por los hongos, las cuales pueden ser superficiales y profundas.

Las infecciones micóticas superficiales afectan la capa córnea o queratina de la piel y sus anexos (pelo y uñas). Estas son producidas principalmente por los géneros: tricophyton, microsporum, epidermophyton, etc.

Tiña de la cabeza (Tinea capitis). Es una infección del cuero cabelludo y los pelos, producida por diferentes especies de hongos, generalmente antropofílicos (del humano) y zoofílicos (de los animales, como el perro).

Se caracteriza por áreas alopécicas con escamas blanquecinas, pero también puede presentarse con inflamación, exudado, costras y formar una placa inflamatoria dolorosa conocida como Querion De Celso.

Es muy frecuente en niños, más raro en adolescentes, debido a la proliferación de sebo que contiene ácidos grasos saturados, lo cual constituye un medio hostil para estos hongos.

Con frecuencia esta última se confunde con infecciones de origen bacteriana, fallando en su tratamiento con antibióticos.

Debemos diferenciar estas tiñas de la cabeza con algunas otras enfermedades, como son: la psoriasis, alopecia areata y dermatitis seborreica. El tratamiento de elección es la griseofulvina.

Tiña del cuerpo (Tinea corporis). Dermatosis que afecta la piel glabra. Adopta forma de placas circinadas de tamaño variable, con tendencia a crecer hacia la periferia. Las lesiones son eritematosas, escamosas y generalmente pruriginosas. Se presentan en cualquier área del cuerpo no vellosa.

El diagnóstico diferencial se puede hacer con: pitiriasis rosada de Gibert, psoriasis, granuloma anular, dermatitis seborreica, etc.

Tiña de los pies (Tinea pedís). Generalmente empieza en los espacios interdigitales con eritema y maceración, conocida como pie de atleta, produciendo un prurito intenso que incita al rascado. Existe otra variedad crónica donde la piel aparece seca, con cierta descamación tipo mocasín. En la forma aguda, se desarrollan vesículas que se unen formando ampollas. Puede producir linfangitis y celulitis por infección secundaria.

Esta variedad puede dar lugar a una reacción dermatofitide, caracterizada por lesiones que se producen generalmente en las palmas de las manos. En las manos no se aíslan hongos, por lo que se considera una reacción alérgica secundaria a los hongos presentes en los pies. Este fenómeno responde a esteroides tópicos para las manos y antimicóticos para los pies.