El ministerio de Salud Pública informó hoy que prioriza medidas administrativas en el Hospital José María Cabral y Báez, en Santiago, con la finalidad de disminuir el impacto de siete casos de tuberculosis detectados en ese centro de salud.
En nota de prensa, la institución explicó que el comité de infecciones se mantiene tomando las medidas necesarias, entre las cuales citó la separación de pacientes a través del triage, así como la habilitación de un área de aislamiento donde se garantice la ventilación e iluminación.
Además, el uso mascarillas N95 para todo el personal de salud, priorizando las áreas críticas, emergencia, medicina interna y otras áreas.
Asimismo, la aplicación de una evaluación inicial y el establecimiento de un protocolo de seguimiento. Agregó que estas medidas se aplican en coordinación entre el equipo de salud mental del ministerio y el hospital.
La institución precisó que este apoyo busca además reducir la ansiedad en el personal que labora en el centro de salud, mientras se desarrollan las investigaciones en proceso para establecer el mecanismo de la transmisión.
Resaltó que ya se completaron entrevistas a los casos y se mantiene intervenciones en las áreas críticas.
De su lado, el Servicio Nacional de Salud se comprometió a en entregar las áreas readecuadas al hospital a la mayor brevedad posible, con el fin de que se pueda normalizar el trabajo en algunas áreas del hospital.