El Ministerio de Salud Pública negó irregularidades en la suspensión de la compra de jeringas, señalando cuál era el precio de las jeringas y las razones por las cuales fueron compradas en Estados Unidos.
«Están apareciendo públicamente rumores, especulaciones y por demás mentiras, que muchas veces pretenden cuestionar las gestión del funcionario a cargo, en este caso el Ministro de Salud, o se van más lejos, e iniciar una trapera hasta las instancias del poder ejecutivo», señalo Bernardo Inoa, director ejecutivo y administrativo de la institución.
Inoa aseguró de que la institución no tocaría «ni con un pétalo de una rosa» ni un solo peso del presupuesto señalado para la compra de las jeringas.
Añadió que todavía no se han comprado jeringuillas, y que la licitación para adquirirlas estaba en desarrollo.
Por su parte, Mariane Fernández, directora de Compras y Contrataciones de Salud Pública informó que las jeringas solicitadas eran exclusivamente para vacunas COVID y aclaró que cada vacuna necesita unas jeringuillas específicas.
«Esas jeringas fueron diseñadas para exclusivamente para vacunas COVID. Cada vacuna tiene una jeringa específica para utilizar. La de Pfizer tiene sus medidas y tamaños, así como las demás vacunas», señaló.
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Precio de la jeringuillas
Fernández explicó, que al no tener ningún historial de compras de esas jeringas en el país, el próximo paso a seguir era la estimación de precios en el mercado nacional.
Citó que se realizaron llamadas internacionales a casas distribuidoras de insumos de vacunación en diferentes países para que les suministraran un precio estimado, que no es el precio que precisamente dicen que compraron en el país.
Basado en esas investigaciones, se concluyó que la jeringa tendría un precio estimado tope de 25 pesos debido a los gastos de traslado y transporte desde Estados Unidos y costos aduanales. Pero ese no será el precio fijo de la jeringa.
Finalizó señalando que otros factores, tales como, una crisis de jeringas a nivel mundial debido a la falta de producción de estas y el aumento de la demanda de estas también influyen en el costo de estas.
«Se estimó un costo de veinticinco pesos, lo que no significa que será el precio de la jeringa. Lo podríamos ver como un precio tope, pero no es necesariamente el coste que se va a comprar», finalizó.