Prevenir
El 40% de los trabajadores padece desgana, cansancio y cuadros depresivos después de las vacaciones, lo que muchos expertos dan el nombre de síndrome posvacacional, una alteración emocional cada vez más extendida.

Una de cada tres personas lo padece el mundo. La edad de quienes lo sufren es de entre 25 y 50 años. Surge antes de llegar a casa y dura unas semanas después de regresar a trabajar o a la actividad habitual.

Las mujeres con cargas familiares son las más precavidas.    

Los expertos atribuyen este estado anímico pasajero al actual ritmo de vida  que vivimos.

Dé cara al regreso a la rutina

Vuelva antes de que se acaben las vacaciones. Adelante dentro de lo posible unos días su regreso.

Déjese unos dos días para deshacer maletas, abrir ventanas y airear su casa, descansar, ponerse al día con tu correo… Cuando llegue, es buena idea recoger todo y volver a ordenar, para poner todo a punto.

Tenga asumido que las vacaciones son temporales; cuanto más realista sea, mejor será su adaptación. Su rutina también tiene sus lados positivos, como volver a ver a su familia, amigos, compañeros… Es el momento ideal para “darse un homenaje” y renovar su look o su vestuario, también ayuda. 

Consejos para cuidar su colon

Mejore su dieta, siga una alimentación que sea pobre en grasas y abundante en hidratos de carbono. Y aumente el consumo de alimentos ricos en fibra.

Evite los dolores… Reduzca o elimine los alimentos que pueden desencadenar episodios de dolor abdominal. Los más perjudiciales son: especias, alcohol, sopas de sobre, cacao, derivados lácteos, bollería, pasteles, helados, mantequilla…

Y los gases. No tome alimentos que sean flatulentos (col, coliflor, repollo, coles de Bruselas, legumbres, puerros, guisantes, frutos secos…) ni bebidas con gas.

Coma poco y muchas veces. Evite las comidas copiosas, coma con frecuencia y más ligero, y masticando bien.

Una buena y eficaz higiene bucal

Acuda al dentista una vez al año, al menos, y desde edades muy tempranas, ya que la caries puede manifestarse a partir de que salga la primera pieza dental.

Cepíllese los dientes tres veces al día, después de cada comida. Imprescindible es hacerlo antes de acostarse y tras levantarse por la mañana.

El estrés acelera el envejecimiento

Que el estrés acelera el envejecimiento es algo que parece probado. Una vida más relajada, tranquila, organizada nos ayudará a mantenernos jóvenes.

El estrés predispone, vuelve crónica y acelera todo tipo de enfermedad e ineficiencia física debilitando el sistema inmunitario, desminuyendo la vitalidad, creando problemas fisiológicos a varios órganos.

Cortos de salud

Para superar con éxito la terrible ansiedad

1. Mida la dimensión de los problemas. La mayoría de las veces, la ansiedad es más intensa de lo que la situación justifica.

2. Intente dormir. El descanso es fundamental.

3. Evite el desánimo. La tristeza, apatía, cambios en el apetito o el sueño.

4. Busque compañía y apoyo. Las relaciones sociales le pueden dar sentimiento de compañía, autoestima y nuevos puntos de vista.

Para vivir más

Hay que llevar una vida sana y muy activa

La vida sana empieza a estar de moda y preocuparse por el cuidado del cuerpo no es cosa de hipocondríacos sino de personas que quieren ponerse en forma para disfrutar de una vida saludable. Por ello es importante el

cuidado del cuerpo. Salud y deporte para ponerse en forma. La buena alimentación: La calidad de vida y salud van unidos de la mano y  lo demás, a su lado, carece de importancia.

SI USAS LENTILLAS de contacto

Prevenir le ofrece un manual para un buen uso de ellas

Sáquelas una hora antes de acostarse. No duerma con ellas. No las uses en la ducha, la piscina o el mar, porque las puedes perder. Jamás en  sauna.

Lleve siempre el estuche y los líquidos de limpieza.  Maquíllese y desmaquíllese con ellas  puestas.  Antes de su uso consulte su  oftalmólogo.

Salud visual

Consejos para cuidar más y mejor sus ojos

Claves para cuidarlos mejor. Protegerlos del sol con gafas homologadas. No lea ni estudie cuando esté demasiado cansado.  Espere al menos una hora, hasta que el ojo se adapte. Cuando lea, de vez en cuando levante la vista y mire a lo lejos.

No olvides iluminar bien su lectura: necesita una luz general y otra centrada en su tarea. La televisión debe verla a una distancia superior a 2 metros.