San Vicente de Paúl
Honran congregación por servicios al país

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POR ÁNGELA PEÑA
No fue devoción por el virtuoso francés amigo de los pobres lo que motivó la designación de una de las principales avenidas de Los Mina con el nombre de San Vicente de Paúl. Se trató del reconocimiento de esa popular comunidad a la obra de los sacerdotes Fernando Barrena, Teodoro Calzada y Jaime Vergara, primeros Padres Paúles que llegaron a la República Dominicana, desde Puerto Rico, en el año 1955.

 Vinieron pedidos por las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl radicadas en San Francisco de Macorís, pero ellos se establecieron en el ensanche Ozama, donde fundaron la parroquia San José Obrero. Al poco tiempo, sin embargo, se expandieron hacia Los Mina, donde erigieron una pequeña capilla de madera que en principio se llamó “La Milagrosa” y se encontraba en la ribera del Ozama, entonces convertida “en una de las mecas de la inmigración rural que venía hacia la urbe para quedarse, sin esperanza de tener otro sitio a donde emigrar”.

 Gregorio Alegría, que llegó al país como misionero de los campos y actualmente es párroco de la iglesia, hoy llamada San Vicente de Paúl, y José Alberto Contreras, ex rector del Seminario Mayor Vicenciano y director del Liceo-Escuela San Vicente de Paúl, narraron la historia de la presencia en el país de esos pioneros que impulsaron una obra evangelizadora, moral, social, de servicio a los más necesitados, que estos y otros han continuado.

 Los tres curas primeros se convirtieron en presencia familiar por esas calles de Los Mina, entonces caminos vecinales y montes, que recorrían a pie predicando, formando pequeñas comunidades, haciendo obras de caridad, narra el padre José Alberto.

 “Instituyeron las asociaciones de laicos, la visita de la imagen de La Milagrosa a los hogares, las Asociaciones Internacionales de Caridad, las Juventudes Marianas Vicencianas y el colegio San Vicente de Paúl”, hoy convertido en Escuela-Liceo. Uno de estos reverendos, el padre Barrena, falleció. Los padres Teodoro  Calzada y Jaime Vergara, españoles, residen en Puerto Rico.

 La parroquia adquirió personalidad jurídica el 17 de noviembre de 1963 y fue denominada San Vicente de Paúl. Ese mismo día se nombró párroco al padre Emiliano Tobar. “Tanto la erección como la toma de posesión fueron presenciadas por más de un millar de personas, el Vicario del Arzobispo y media docena de misioneros paúles, entre ellos el padre Luis Sainz, que fue nombrado asistente del párroco”.

 Ya los primigenios religiosos se habían marchado pero su trabajo inicial quedó grabado en el corazón agradecido de la feligresía de Los Mina que había solicitado el homenaje de una vía con su nombre en el sector. “San Vicente de Paúl fue el fundador de la Congregación de los Padres Paúles, y como ellos tres fueron los primeros que trabajaron y recorrieron el camino eclesial y civil del desarrollo de este barrio, se pidió el nombre del santo, en honor a su labor y su presencia”, explicó el educador y misionero José Alberto Contreras.

 Añadió que la tarea de estos clérigos fue “incansable, ininterrumpida. Se entregaron en cuerpo y alma a la evangelización, la promoción de acudir en ayuda de los más necesitados, que es la característica nuestra: servir a los pobres”.

 “Dicen que lo que es Los Mina hoy se debe al trabajo de ellos, no sólo en el aspecto de la religiosidad sino también en el sentido de la solidaridad, que es muy característico de esta gente, y de lo moral y lo religioso. Aquí se acompaña a los pobres y se lucha para que ellos reconozcan su dignidad”, manifestó Contreras.

 Otros sacerdotes, dominicanos y extranjeros, han agregado múltiples obras a las de Fernando Barrena, Teodoro Calzada y Jaime Vergara. Están las Misiones Populares, el centro médico “Auxilio Mutuo”, el “Hogar Residencia de Ancianos Bethania”, que creó y administra el padre Gregorio Alegría, la escuela “Margarita Nauseau”,  y la laboral “La Milagrosa”, para mujeres, en La Barquita, y seis escuelas primarias en las que se imparte escolaridad gratuita.

 El Liceo-Escuela San Vicente de Paúl fue visitado en 1979 por Juan Pablo II que pronunció allí su discurso a los pobres y entregó un cheque para la edificación de dos casas, una para el sacristán y otra para los sacerdotes.

 Un reconocimiento que se hace a los Padres Paúles de Los Mina es su trabajo descentralizado, basado en la búsqueda de lugares donde la gente se congregue para formar en ellos “Comunidades” a fin de que se reúnan “más fraternalmente”, porque el templo es pequeño para una feligresía tan inmensa, comunicó el padre Alegría.

San Vicente de Paúl

 Nació el dos de abril de 1581 en Ranquine, cerca de Dax, en el suroeste de Francia, tercer hijo del campesino Juan de Paúl. Vicente llevaba a pastorear las ovejas, vacas, cerdos y salía descalzo, con humildes provisiones. Con enormes sacrificios, el padre le envió a los 14 años a un colegio de franciscanos en la próspera ciudad de Dax.

 Posteriormente estudió en Toulouse, donde recibió la tonsura y las órdenes menores. Aunque su padre, fallecido en 1598, le dejó  parte de la herencia para el pago de sus estudios, rechazó esta ayuda y pudo subsistir enseñando humanidades en el colegio Buzet y seguía estudiando Teología. Fue ordenado sacerdote en 1600. Tras dirigir varias parroquias y posiciones eclesiásticas, ocurrieron acontecimientos providenciales que transformaron su vida: sanaba enfermos, logró conversiones de incrédulos y recibió dones especiales. Cambió su carácter áspero en bondadoso, tierno, amoroso.

 Se entregó completamente al servicio a los pobres, fundó la “Congregación de la Misión”, las compañías de las Hijas de la Caridad o “Equipos de San Vicente”. La Congregación de los Paúles y las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl se han extendido por todo el mundo prestando ayuda “a millones de personas desgraciadas: niños abandonados, huérfanos, enfermos, heridos, refugiados, presidiarios. El servicio sencillo y discreto al prójimo constituye el principal fundamento de todas esas asociaciones vicentinas”, significan autores de la vida del santo, fallecido el 27 de septiembre de 1660, a los ochenta años.

 Fue proclamado santo por el Papa Clemente XII, el 16 de junio de 1737. Su fiesta se celebra el 27 de septiembre. “El Santo Padre León XIII proclamó a este sencillo campesino como Patrono de las asociaciones católicas de caridad”.

La calle

 El tres de agosto de 1973, el entonces Presidente Joaquín Balaguer emitió el decreto número 3755 que denomina “Avenida San Vicente de Paúl” la vía “que se inicia en el tramo oriental del puente Francisco del Rosario Sánchez y termina en la autopista Las Américas, atravesando Los Mina Viejo”. Es una de las más transitadas del área. Además de la iglesia y el liceo-escuela San Vicente de Paúl, en ella está ubicado el hospital San Lorenzo de los Mina.

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