EFE. REPORTAJE. Por su alto contenido en agua -un 90%- ideal para hidratar el cuerpo, así como por sus propiedades nutritivas, frescura  y dulce sabor, la sandía es una de las frutas más consumidas en verano. Es una aliada  para contrarrestar  el calor.

La sandía tiene  un valor calórico  muy bajo, de  apenas 20 calorías por cada 100 gramos. Es rica en vitaminas A, B y C, así como  sales minerales, entre las que se destacan el potasio y el magnesio. 

Según los expertos, el color rosado de su pulpa se debe a la presencia del pigmento licopeno, una sustancia con capacidad antioxidante. La fruta es recomendada en personas  que padecen de problemas renales o de las vías urinarias. Esta fruta,  originaria de África posee propiedades depurativas, ayuda a mantener la presión arterial, y su contenido en fibra facilita  limpiar los intestinos.

Madura y fresca
No sabemos si con el descubrimiento de los investigadores estadounidenses habrá una demanda masiva que provoque una subida de los precios de la sandía. Tampoco sabemos si el efecto Viagra se notará más o menos según la variedad: alargadas, redondas, cuadradas, jaspeadas, lisas, de pulpa roja, anaranjada o amarilla, con o sin semilla.

Lo único cierto es que hemos de saber elegir y conservar la sandía que vayamos a consumir. Es importante saber que la sandía madura presenta un aspecto amarillo pálido o crema en la parte inferior de la cáscara, una pulpa de textura acuosa y muy jugosa.

En la mesa
La sandía se toma principalmente  durante los meses de verano, temporada en la que alcanza su madurez. Al ser propia de una estación con altas temperaturas, la mayoría de sus preparaciones culinarias son las típicas de estas fechas, por lo que la encontraremos en sorbetes, zumos o helados acompañado de naranja o leche, además de en ensaladas o sopas frías.

En este momento, la sandía está siendo un poco más utilizada en la alta gastronomía, principalmente en cartas de verano. Los amantes de cocina peruana podrán degustar un exquisito ceviche –plato de pescado o marisco crudo, sazonado con limón, sal y ají– de cazón (tiburón) y salmón con rodajitas de sandía.

Como pequeña recomendación, les sugerimos un gazpacho de sandía, un aperitivo perfecto para el verano, que se podrá servir bien frío. Para ello necesita media sandía, una libra de tomates cortados en trozos, un pimiento verde y un diente de ajo. Tritura el conjunto con una batidora, y le añade sal, pimienta, albahaca, cuatro cucharaditas de aceite, una cucharadita de vinagre y agua fría para aligerarlo hasta el punto que desee.

Esta fruta se destaca por su frescor y sabroso gusto. La sandía es, sin duda, la reina del verano, y, por  si fuera poco, científicos de la Universidad A&M de Texas (Estados Unidos) afirman que la citrulina (sustancia capaz  de relajar los vasos capilares) y la arginina (sustancia que facilita el sistema circulatorio) dilatan las vasos sanguíneos y producen efectos similares al Viagra.

Receta

Ensalada de sandía con queso feta :

1  sandía

3/4  libra queso feta

3 cucharadas  de aceite de oliva

5 hojas de menta fresca

1/2 libra de almendras peladas

Sal

Pimienta

Limón

Preparación:

Cortar la sandia y el queso en dados, mezclar y reservar.

En una licuadora, mezclar el aceite, las hojas de menta y las almendras. Salpimentar y añadir unas gotitas de zumo de limón. Colocar en un plato la mezcla de fruta y queso imitando una raja de sandia (con la corteza). Aliñar  con el pesto de menta y almendras.