Las inversiones del grupo Sans Soucí para elevar el atractivo de la ciudad de Santo Domingo como destino de cruceros serían insostenibles en cinco años, si esas inversiones no son  acompañadas de un  saneamiento del entorno del río Ozama.

Víctor Macarrulla, miembro del Comité Ejecutivo, informó que este año han invertido dos millones de dólares en dragado, pero el año que viene, si el río Ozama no es saneado de manera definitiva, se tendrá que gastar luego una suma igual o mayor.

Macarrulla agregó que hay varios planes que se están discutiendo para re solver el problema, que envuelve al sector público y al privado.  Dijo que en el presupuesto del país para el año que viene hay una partida para financiar esos trabajos. “Nosotros vamos a seguir haciendo inversión en dragado para asegurar que los pasajeros vengan pero, en el cuarto o quinto año, esto será insostenible. Entonces tendremos que ir estudiando resoluciones”, expresó. Molina, director ejecutivo de Sans Soucí Ports,  agregó que a la larga, cuando se estén acumulando toneladas de basura que llegan, no será factible  manejar el proyecto.

“No se hace nada haciendo un puerto y gastando millones en desarrollar la infraestructura del puerto, si la infraestructura de la ciudad no está en condiciones, las calles, por ejemplo, en malas condiciones y el río Ozama no  saneado”, pronosticó.

Aseguró que para enfrentar este problema se tiene que trabajar en toda la ribera del río  y hay que hacer un esfuerzo conjunto con un plan de desarrollo.

Abandono

La semana pasada, el periódico HOY publicó un reportaje que reveló  el deterioro y el abandono en que se encuentran los  ríos Ozama e Isabela, en los que  no  existe ninguna acción para evitar que la basura vaya a esas fuentes de agua que desembocan en el mar Caribe.  Todos los pobladores en el entorno de ambos ríos los utilizan como vertederos y las industrias de todo tipo los envenenan con los excedentes químico que vierten en ellos sin  tratamiento previo. Varias entidades comunitarias  trabajan en el saneamiento de los dos ríos, pero sus aportes son todavía muy mínimos.