Hoy 
POR DIEGO PESQUEIRA
La litis por el control del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) entre las tendencias de Hatuey de Camps y el ex presidente Hipólito Mejía cumplirá un año en manos de la Suprema Corte de Justicia, sin que se produzca un fallo que aclare el panorama en esa organización política.
Fue el 6 de febrero del 2004 que De Camps presentó el recurso de casación contra la resolución 013/03, emitida por la Cámara Contenciosa de la Junta Central Electoral (JCE) en fecha 23 de diciembre del 2003, que reconoce el Comité Ejecutivo Nacional que organizó la convención que proclamó la candidatura presidencial de Mejía.
A mediado del mes pasado el presidente de la Suprema, Jorge Subero Isa, afirmó que el caso sería conocido en febrero, un año después de iniciada la controversia.
Además, en su resolución la Cámara Contenciosa de la JCE dejó sin funciones a de Camps dentro del PRD y reconoce a Vicente Sánchez Baret como presidente de esa organización política.
Desde ese momento a la fecha, la Suprema ha sido apoderada de varias acciones por cada una de las partes envueltas en el conflicto, pero el alto tribunal todavía no ha dado un fallo definitivo en torno al reclamo de de Camps y sus seguidores.
Además, el 10 de febrero los abogados del destituido presidente del PRD incoaron un recurso de suspensión contra la resolución 013/03, que validó la convocatoria al CEN hecha por Milagros Ortiz Bosch, Rafael Suberví Bonilla y Enmanuel Esquea Guerrero el 15 de noviembre del 2003.
El 19 de febrero, el dirigente perredeísta Milton Ray Guevara presentó ante la Suprema un recurso de oposición contra la instancia intentada por de Camps.
Empero, la Suprema rechazó este pedimento, dejando pendiente el fallo final.
Los recurrentes sostienen que tanto la candidatura de Mejía como la elección de Baret fueron nulas e ilegales.
Mediante la resolución de la Cámara Contenciosa de la JCE, se declaró como válida la convocatoria del Comité Ejecutivo Nacional CEN del PRD, actividad llevada a cabo en el hotel Embajador el 15 de noviembre del 2003, donde acudió según la JCE una matricula correspondiente a las dos terceras partes del total 601.
También, la resolución rechazó la propuesta de de Camps, que se reunió de manera paralela en la sede de la Internacional Socialista.
La JCE alegó que declaró ilegítima esta convocatoria por falta de quórum.
La acción del PRD, que encabezaba Mejía, estuvo motorizada por Tony Raful, Tirso Mejía Ricart y Jacobo Fernández.
SUPREMA
El pasado mes, Jorge Subero Isa, presidente de la Suprema, afirmó que el recurso de casación contra la decisión de la Cámara Contenciosa de la JCE, que reconoce como válido el actual CEN del PRD, sería conocido este año, un año después de iniciada la controversia.
Adelantó que la acción, que busca anular el fallo de la JCE y la actual dirigencia perredeísta, será conocido por la Tercera Cámara de la Suprema.
En una oportunidad, el presidente de la Suprema calificó de complejo la acción intentada por de Camps, quien pidió que fuera casada la resolución de la JCE por uno o cualquiera de los medios expuesto y que la controversia sea juzgada nueva vez por el tribunal electoral.
También ha manifestado que el caso no ha sido conocido por razones procesales.
En torno al caso, la Suprema pidió a la JCE una explicación sobre las causas que motivaron la aceptación de la candidatura de Mejía para las elecciones del pasado 16 de mayo.
La acción de la Suprema, hecha mediante comunicación, surgió tras ser apoderada del recurso de casación por parte del destituido presidente del PRD.
Estas declaraciones fueron emitidas por el doctor Salvador Ramos, presidente de la Cámara Contenciosa de la JCE, al periódico El Nacional en fecha viernes 13 de febrero.
Mientras que el juez de la Cámara Contenciosa de la JCE, Ramón Hernández, afirmó en fecha 12 de febrero del 2004 que el recurso de casación presentado por de Camps no suspende la ejecución de una sentencia o resolución del organismos comicial.
