Montevideo, (EFE).- La jueza uruguaya Anabella Damasco, acusada de quedarse con dinero incautado en operaciones policiales, fue procesada finalmente por seis delitos de peculado y uno de estafa, informaron hoy fuentes judiciales.

El juez de Crimen Organizado Jorge Díaz, que la semana pasada procesó y dispuso el ingreso a prisión de Damasco como acusada de siete delitos de peculado, tipificó finalmente que uno de esos delitos fue de estafa, más grave que el anterior. Díaz llegó a la conclusión de que la jueza realizó el último retiro de dinero cuando ya era ministra de un tribunal de apelaciones y por lo tanto ya no era la responsable del juzgado que tenía bajo su custodia el dinero.

Aunque las investigaciones continúan se estima que la jueza se apropió de unos 55.000 dólares y no reveló a la Justicia el destino del dinero, según dijo, para no involucrar a más personas. Las primeras sospechas recayeron sobre la jueza cuando una mujer procesada por proxenetismo tras recuperar la libertad reclamó a través de sus abogados unos 10.000 dólares que le fueron incautados cuando fue detenida pero el dinero no apareció.

El «caso Damasco» causó gran impactó en Uruguay debido a que era considerada una magistrada ejemplar y fue la presidenta de la Asociación de Magistrados hasta el pasado mes cuando renunció al trascender que era inminente su procesamiento.

Damasco tuvo a su cargo varios casos relevantes entre ellos la denominada «Operación Campanita» con la que se logró desarticular en 2006 una banda de narcotraficantes que lavaba dinero en Uruguay con la asistencia de profesionales locales, que terminaron en prisión. La «Operación Campanita» llevó al procesamiento de 30 personas y a la incautación de 344 kilogramos de cocaína y de una fuerte suma de dinero en efectivo. EFE