Se deteriora salud de Arafaf

Se deteriora salud de Arafaf

RAMALA, Cisjordania (AP).- La salud de Yaser Arafat empeoró el miércoles y un equipo de médicos concurrió a su cuartel para examinarlo, dijo un funcionario allegado al titular de la Autoridad Palestina. Arafat estaba enfermo desde hacía dos semanas, y según funcionarios palestinos padecía gripe.

En Israel se conjeturaba que padecía cáncer de estómago, pero dos médicos de Arafat dijeron el miércoles que un análisis de sangre y una biopsia demostraron que no tiene cáncer del sistema digestivo.

   El miércoles por la noche, el estado de Arafat se agravó y los médicos acudieron a su cuartel, dijo un funcionario de la oficina del dirigente.

   Poco después, el primer ministro Ahmed Qureia y el ex primer ministro Mahmoud Abbas fueron convocados al cuartel, dijo la fuente.

   Los dos ingresaron al cuarto de Arafat, pero otros funcionarios presentes debieron permanecer afuera, añadió.

   La salud de Arafat ha sido objeto de innumerables conjeturas. Sus colaboradores aseguran que el líder palestino sólo tenía gripe, pero en el pasado han mantenido en reserva sus verdaderos problemas de salud al parecer para evitar que parezca débil.

   Arafat se ha negado a nombrar a un sucesor por temor a que surja algún rival que lo desafíe, y no ha surgido ningún claro retador.

   El miércoles, Arafat seguía descansando, y suspendió el ayuno por Ramadán por segundo día consecutivo, dijeron sus colaboradores.

   El líder palestino fue sometido a pruebas de sangre después que el martes los médicos afirmaran que tenía cálculos biliares. Las autoridades israelíes habían conjeturado que Arafat tenía cáncer estomacal.

   Un miembro de su equipo médico, que pidió no ser identificado, dijo que el examen de sangre no mostraba señales de cáncer. El médico dijo que no se habían previsto más exámenes.

   Otro médico dijo que una biopsia practicada al líder palestino el lunes durante una endoscopia _ examen de las vías digestivas _ tampoco dio muestras de cáncer.

   Arafat se encuentra desde hace dos años confinado en su cuartel de Ramala, cercado por tanques y soldados israelíes. Israel desea marginarlo del proceso diplomático al considerar que ha alentado el terrorismo.

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