La población espera que hoy el gobierno anuncie rebajas significativas en los precios de todos los combustibles, acordes con la baja sostenida de los precios del petróleo durante la semana. Como los precios del crudo determinan los precios locales de los combustibles, el público aguarda que el gobierno proceda acorde.  Ayer el crudo cerró a US$107.89 en Nueva York, mientras una semana antes había cerrado a US$115.59; una baja, pues, de $7.70, equivalente a 6.6%.

En Estados Unidos los consumidores pegan el grito al cielo cada vez que la gasolina sube 10 centavos. Ambos candidatos en la actual campaña electoral de ese país abogan por una rebaja de impuestos a los combustibles, al menos temporal.

Una comparación de los precios de la gasolina en diferentes países muestra la desproporción entre el precio del petróleo y el precio de los derivados en nuestro país, la excesiva carga impositiva al consumo.

 Entre un grupo de   productores y no productores de crudo seleccionados, solamente países ricos y con sistemas de transporte público eficientes como España (US$5.36), Alemania ($6.88), Sudcorea ($6.21), Francia ($6.60) y el Reino Unido ($7.13) tenían gasolina más cara que República Dominicana, al 31 de diciembre de 2007.

Otros como Australia ($3.85), Canadá ($3.59), China ($2.29), Japón ($4.49), México ($2.40), Estados Unidos ($2.80), la tenían más barata. En nuestro país a esa fecha el precio era de US$4.83; actualmente es de $5.70. No es casual que los dirigentes del sector agropecuario, por ejemplo, hayan explicado la imposibilidad que tienen de ser competitivos utilizando combustibles tan caros.