El año 2013 concluye sin que la Fiscalía del Distrito Nacional informe el rumbo que tiene en la justicia la investigación que volvió a abrir en agosto pasado sobre la desaparición del profesor universitario y dirigente de izquierda Narciso González (Narcisazo), visto por última vez hace 19 años. El país fue condenado por este caso.

La sociedad sigue en vilo, esperando el desenlace del que se tiene como un crimen con matices políticos. Son muchas las interrogantes de su desaparición, muerte o asesinato, y de ser un crimen, la sociedad se pregunta quién o con quiénes lo mataron, por qué, y quién ordenó que le quitaran la vida.

La Fiscalía no ha dicho si ha interrogado a alguien. La fiscal, Yeni Berenice Reynoso, se reunió con su viuda Altagracia Ramírez y su abogado Tomás Castro el 23 de agosto. Luego dijo que ampliarían las investigaciones.

Fueron las únicas informaciones ofrecidas luego de que el procurador general, Francisco Domínguez Brito, instruyera a la fiscal Reynoso en julio de este año a reanudar las invetigaciones de lo que se presume “un crimen por encargo”, según allegados del profesor que dejó de ser visto el 26 de mayo de 1994.

Han circulado versiones de que se habría suicidado y de que lo mataron y lanzaron su cuerpo al mar.

Condena. En abril de 2012, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó a la República Dominicana por la desaparición forzada de González y multó al país con una indemnización de 395 mil 419 dólares, no entregados a la fecha.