AEROPUERTO LAS AMÉRICAS.- Un promedio de setenta y cinco Dominicanos fallecen mensualmente en el extranjero a consecuencia de diferentes enfermedades, ahogados, en hechos violentos, suicidios y en accidentes de tránsito.

La cifra fue obtenida de los informes estadísticos que mensualmente rinden los médicos de servicios en el Aeropuerto de Las Américas, al Ministerio de Salud Pública, Departamento Aeroportuario, Aerodom y otros organismos que inciden en las actividades aeroportuarias.

En los meses de marzo y abril, respectivamente, fueron traídos al país los cadáveres de 144 dominicanos, hombres y mujeres de diferentes edades que fallecieron a consecuencia de distintas enfermedades en Estados Unidos, Puerto Rico, España, Italia, Francia, Panamá, Venezuela, Curazao y San Martín, entre otras naciones.

La mayoría de los criollos murieron a consecuencia de cáncer en diferentes órganos, paros cardiacos, cirrosis hepática, neumonía. Otros en números inferiores fallecieron en accidentes de tránsito, hechos violentos, ahogados o se suicidaron. En los meses de enero y febrero, también fueron traídos al país la cantidad de 124 criollos que también fallecieron en el extranjero a consecuencia de las enfermedades señaladas, así como en incidentes, accidentes o por ahogamiento.

De acuerdo a los datos obtenidos en el Aeropuerto de Las Américas, en los primeros cuatro meses, es decir enero-abril, un total de 268 criollos, murieron en el extranjero y sus cadáveres fueron traídos al país en vuelos de las diferentes líneas aéreas.

La mayoría de los fallecimientos se produjeron en diferentes lugares de los Estados Unidos, Puerto Rico y España, lugares donde viven centenares de criollos.

Médicos consultados por los periodistas que cubren la fuente de Las Américas dijeron que son muchos los factores que inciden en los casos de fallecimiento por cáncer, paros cardiacos y cirrosis hepática, especialmente la mala alimentación y la contaminación ambiental. El 52 por ciento de las personas que fallecieron en el extranjero a consecuencia de los señalados males y enfermedades, vivían en distintos puntos del interior del país y el 48 restante, en Santo Domingo y zonas aledañas cercanas.

Una vez los cadáveres de los criollos llegan al Aeropuerto de Las Américas, son examinados por un cuerpo médico y luego entregados a sus familiares para su sepultura.