Por Doug Cameron
Un informe clave del gobierno de Estados Unidos dado a conocer ayer se espera que acelere la demanda de maíz, al confirmar que los productores de maíz tendrán una cosecha récord este año.

Los comerciantes pronosticaban que los reportes sobre el área de cultivo y las reservas del Departamento de Agricultura confirmaría las expectativas de que los agricultores han sembrado más de 90,5 millones de acres de maíz, como se indicó en una encuesta realizada en marzo. El informe también ofrece actualizaciones sobre la contracción de la sierre de soya y una cosecha de trigo que se espera sea afectada por una ola fría después de Semana Santa.

Los agricultores del país están desplazándose hacia cultivos de más valor de productos como el frijol de soya, el algodón y el trigo. El maíz ofreció grandes retornos de US$750 el acre, comparado con US$420 para la soya, dijo Brad Bowman, un cosechador de maíz de Nebraska, en una llamada organizada por Citigroup.

El desplazamiento hacia el maíz representa una transformación significativa en el paisaje agrícola de EEUU, y está motivado en gran medida por la creciente demanda del etanol derivado del maíz. Los precios del maíz alcanzaron alturas de  10 años de más de US$4 el bushel en febrero, pero expectativas de un cosecha de más de 13 millardos de bushels ha hecho retroceder los precios a  US$3.57 las últimas semanas.

Se espera que el etanol derivado del maíz devore una cuarta parte de la cosecha de maíz de EEUU este año, lo cual deprimirá las exportaciones y generará un debate que se intensifica sobre el impacto de los suministros de alimentos.

El mal tiempo en la temporada temprana de siembra ha despertado inquietud sobre el rendimiento de la cosecha de maíz, en particular, porque los agricultores serraron maíz en áreas no tradicionales y evitaron la rotación del maíz y el frijol de soya, lo que ayuda a restablecer los suelos.

Sin embargo, las condiciones mejoraron en mayo, lo cual influyó en  que los analistas pronosticaran rendimientos por encima de la tendencia, ayudados por el incremento en el empleo de fertilizantes y las semillas llamadas “triple-sack”, que resultan más resistentes al clima y a los pesticidas.

Con precios que se espera caigan tras el informe del USDA, los comerciantes dicen que los grandes compradores -en especial, los de alimentos y etanol- sacarán ventaja, asegurando una reserva temprana. “Los compradores van a ocupar las primeras líneas”, dijo Greg Wagner, director de mercadeo y administración de riesgo en Horizon AG, en Chicago.

El incremento en la siembra de maíz ha venido principalmente a expensas de la soya, el algodón y el trigo.

Los agricultores estadounidenses indicaron en marzo que ellos sembrarían 67,1 millones de acres de soya, el nivel más bajo desde 1994, y una baja de 11% del año anterior. Los analistas de granos dijeron que la reducción en el cultivo de la soya pudiera provocar importantes descensos en las reservas, que a su vez, pudieran hacer subir más los precios y resultar en que los criadores de animales pagaran más por los piensos producidos con soya.

También presiona más a los productores de soya brasileños y argentinos para que incrementen su producción con el fin de llenar el espacio vacío en los mercados de exportación que es probable que deje la baja de  Estados Unidos.

Sin embargo, mientras muchos esperaban que Brasil desplazara a EEUU como el mayor productor de frijol de soya el año próximo -estimulado por la creciente demanda y otros negocios que mantiene con China- algunos analistas dijeron que el atractivo del maíz y los problemas con las tasas de cambio pudieran deprimir la producción de América del Sur.

La capacidad de los agricultores estadounidenses de manejar la demanda creciente de maíz pasa por asegurar rendimientos más altos mediante el empleo de semillas más trabajadas de compañías como Monsanto y DuPont.

Monsanto, que reportaba ayer sus ingresos del tercer trimestre, advirtió en abril que los suministros de semillas de maíz más especiales se habían agotado en la temporada de 2007, aunque dijo que espera que su producción cumpla con la demanda el año próximo.

VERSION IVAN PEREZ CARRION