POR PASTOR VASQUEZ
Más de 200 autobuses de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA) resultaron con los motores fundidos en los últimos meses de la pasada administración gubernamental, debido a un descuido en el mantenimiento, denunció el director del organismo, Ingeniero Ignacio Ditrén.

Manifestó que a esas unidades se les fundieron sus motores por no cambiarle a tiempo el aceite y los filtros, algo que dijo debe hacerse rutinariamente cualquier propietario de vehículo.

El ingeniero Ditrén dijo que esa situación se produjo pese a que la empresa encargada de darle servicios de mantenimientos a los autobuses es propiedad de el pasado director de la OMSA, Diógenes Castillo.

Agregó que expertos de la HYUNDAY Y LA MERCDES BENZ están haciendo una evaluación de la situación en que se encuentran decenas de unidades de la OMSA, y adelantó que una gran cantidad tendrán que ir al parque de chatarras porque se encuentran en condiciones inservibles.

Al participar en el programa D`AGENDA que cada domingo produce Héctor Herrera Cabral por Telesistema Canal 11, el funcionario advirtió que alguien tendrá que pagar por los desafueros que allí se cometieron en contra de un servicio tan vital para los sectores de menos ingresos de la población.

Informó que solicitó una auditoría a la Contraloría General de La República, y que inmediatamente tenga los resultados, si estos determinan que se le dio mal uso a los recursos de la OMSA, apoderará de la misma a las instancias correspondientes.

Reiteró que existía una mafia en algunas rutas entre chóferes y cobradores mediante la cual la institución dejo de recibir millones de pesos al año algo que califico como un crimen contra una institución de servicios.

Ignacio Ditrén reveló, además, que la OMSA pagaba más de un millón de pesos en sueldos a militares, la mayoría de los cuales estaban al servicio de parientes del señor Diógenes Castillo.

Agregó que todavía una gran parte de esos militares no se han reportados a la OMSA porque siguen al servicio de la esposa, hijos y sobrinos del pasado director de la institución, y conminó esos soldados a presentarse a donde ante su superiores so pena de ser sancionados drásticamente.

Ditrén dijo, además, que el abultamiento de la nómina en la OMSA llegó a un grado tal, que de un promedio de cinco empleados por autobús que dejó cuando abandonó el cargo que hoy ocupa de nuevo, en mayo del presente año esa relación llegaba a 20 empleados por unidad en servicio.

Precisó que muchas  personas cobraban sin trabajar, porque el pasado fin de semana cuando la cantidad de autobuses hábiles para transportar pasajeros subió a 175, tuvo dificultad para ponerlos a operar por la falta de chóferes y cobradores.

Explicó que la falta de control era de tal magnitud que un autobús que desapareció desde el pasado ocho de agosto fue recuperado el pasado viernes cuando fue encontrado en la margen oriental de Santo Domingo y todavía se desconoce quien lo tenía en su poder por mas de tres semanas.

Calificó como inaceptable el que decenas de autobuses de la OMSA estén prestando servicios en otras instituciones cuando miles de pasajeros no encontraban en que transportarse a sus lugares de destino.

Dijo que por más labor filantrópica que este realizando una institución, La OMSA no puede dejar de cumplir con el rol para el que fue creado, ofrecer transporte a la población, para facilitarle sus unidades a terceros.

Prometió que pese a la entelequia en que ha encontrado convertido a la OMSA, esta será rescatada y volverá a ofrecerle un servicio, eficiente, confiable y barato a la población.